La justicia detiene el primer cambio de Colau en la Rambla

BarcelonaLas paradas de las antiguas pajarerías de la Rambla, las que en 2009 se reconvirtieron en tiendas de todo tipo de cosas –desde helados hasta objetos de recuerdo–, ya tenían fecha de desahucio. El Ayuntamiento las quiere fuera de la Rambla este año, incluso antes de que avance la reforma urbanística que empezará por la parte de Colom. El 22 de febrero todo parecía a punto para comunicar el desahucio administrativo de las cinco primeras paradas, porque caducaba el plazo de 30 días que les dio el consistorio para entregar las claves de las tiendas de forma amistosa. Las otras tiendas tenían que tener el mismo destino los días siguientes. Pero la petición de medidas cautelares de los paradistas, que quieren promover una iniciativa legislativa popular (ILP) para declarar el mercado Patrimonio Cultural Immaterial, lo frenó todo.

Ahora el juzgado contencioso administrativo número cinco de Barcelona ha ratificado estas medidas: el desahucio no se podrá producir, como mínimo, hasta que acabe el periodo para recoger las 50.000 firmas necesarias en 120 días hábiles para que la ILP salga adelante. Los planes municipales eran haber retirado las once paradas esta misma primavera y los antiguos ocellaires hacían constar estos días su malestar con pancartas en las tiendas exigiendo "diálogo" y una solución acordada para su futuro.  

"Los acuerdos, las leyes y las personas se respetan", recuerda una de las pintadas en referencia a los 98 trabajadores amenazados por el cierre y al entendimiento que sellaron paradistas y Ayuntamiento, en 2009, para decidir qué pasarían a vender las paradas cuando la ordenanza ya les prohibía exponer animales en la vía pública. Y el gobierno municipal, a su vez, se acoge al argumento que las licencias de estas tiendas caducaron el año pasado: reiteran que tenían un permiso a 50 años que se les concedió en 1971, cuando las paradas de animales pasaron a ser fijas en la Rambla.

Ahora los paradistas aprovechan la fiesta de Sant Jordi, que traerá un volumen de gente importante a la Rambla, para lanzar la campaña de recogida de firmas. Cualquier ciudadano residente en Catalunya y que tenga más de 16 años puede hacer constar su apoyo al antiguo mercado de animales. El proceso de desahucio queda, por ahora, aplazado, pendiente de si se consigue o no el hito de las firmas, a pesar de que el Ayuntamiento ya ha comunicado que recorrerá la decisión de mantener las paradas de forma cautelar.