El mejor anuncio de Barcelona
El Mercat de la Boqueria homenajea a Juanito del Bar Pinotxo
BarcelonaDice que ha servido una media de entre 50 y 70 cortados cada día desde hace tantos años que ha perdido la cuenta y que no sabría escoger cuál es el plato que sale más bueno de los fogones de su bar, a pesar de que entre el público se aclaman los garbanzos. Tiene 87 años, a pesar de que él prefiere decir que ya los tiene "todos" y que ha parado el tiempo y, a corto plazo, no tiene ninguna idea de jubilarse. Joan Bayen es 'el Juanito' de la Boqueria, el del Bar Pinotxo, y hoy el mercado que tanto quiere –y que tanto le debe– ha querido dedicarle el homenaje que se merece sin que sea necesaria ninguna efeméride ni ningún anuncio de jubilación. Un reconocimiento para el pulgar hacia arriba y sonrisa más fotografiados de la ciudad.
"Espero una placa el día que... de aquello", ha asegurado hoy, humilde. Y la placa ya la tiene sin necesidad "de aquello". Se la han entregado este lunes por sorpresa el gerente de Mercats de Barcelona, Òscar Ubide; la regidora del área, Montserrat Ballarín, y otras personalidades como el presidente de la Associació de Comerciants de la Boqueria, Salvador Capdevila, en un acto que también ha contado con el actor Joan Pera –"El número 1", según Bayen–, el chef Carles Gaig y también Alberto Herrero, que ultima un libro sobre la Boqueria del Pinotxo. La placa lo reconoce como la esencia de la Boqueria. "Esto no tiene precio", se ha emocionado Bayen, que, como buen embajador, no se ha cansado de repetir que, se diga lo que se diga, la Boqueria es "el mejor mercado del mundo" y que lo que no se encuentra aquí, no se encuentra en ninguna parte.
El homenaje no ha impedido, sin embargo, que él, Juanito, abriera el bar como siempre. Ya no llega antes de las cuatro de la mañana, como hizo cada día hasta hace no tanto, pero no se presenta más tarde de las siete. "Me dice que no se jubilará hasta que no acaben las obras de la Sagrada Familia", bromea Carme, su mujer. Se conocieron, evidentemente, trabajando en el mercado. Ella en una parada de fruta y él en el Pinotxo, el bar que acabó adoptando el nombre de su perro, muy querido por la clientela. Pero ella se jubiló "ya hace años" y él... "¿jubilarme para qué?", se preguntaba hoy. Y si se le pregunta que escoja cuál es la persona que más ilusión le ha hecho atender detrás la barra del bar, no escoge a ninguno de los muchos famosos que han pasado por él, sino a su mujer, que hoy lo recogía para ir hacia el salón de actos: "Es un día muy especial".
¿Al Pinotxo en la Sagrada Familia?
Entre todos los asistentes al acto, batería de anécdotas, como el recuerdo de la pareja de turistas australianos que hace unos días se debatían entre visitar la Sagrada Familia o poderse hacer la foto con Juanito. "Tu tienes la culpa de buena parte del recuerdo que se llevan de Barcelona", le ha remarcado Gaig, confirmando así a Juanito como el mejor anuncio de la ciudad. O la regidora socialista Montserrat Ballarín, que ha compartido recuerdos con el exalcalde Xavier Trias y ha remarcado que el impulso a la red de mercados municipales casi no ha encontrado discrepancia política en Barcelona. Solo la CUP criticó alguna decisión el pasado mandato, cuando tenía representación en el consistorio, como la reforma aprobada para el Mercat de l'Abaceria de Gràcia.
El reconocimiento a Bayen es el primero del ciclo El consell de savis, que quiere ser un homenaje a personajes emblemáticos de nuestra cocina, tanto chefs como jefes de sala. Además de a Juanito también se reconocerá la trayectoria de nombres como el de los cocineros Francesc Fortí o Francesc Lladonosa. El primero, sin embargo, tenía que ser el de casa: Juanito.