El nuevo Hospital Clínic en la Diagonal empieza a caminar

BarcelonaUno de los proyectos más largamente batallados en el país ha entrado este lunes en una nueva fase. La Generalitat, el Consorcio Hospital Clínico de Barcelona, ​​la Universidad de Barcelona (UB), los ayuntamientos de Barcelona, ​​Hospitalet de Llobregat y Esplugues de Llobregat y la Diputación de Barcelona han firmado el convenio que solemniza el acuerdo para construir el nuevo Campus de Salud del Hospital Clínic de Barcelona. Un "día histórico", en palabras de la mayoría de los firmantes, que confirma que, después de muchos años buscando emplazamiento, el Hospital Clínic crecerá en las pistas deportivas de la Universidad de Barcelona (UB). El convenio, sin embargo, todavía no habla ni de calendario ni presupuesto.

"Hoy firmamos mucho más que un convenio. Estamos trazando lo que es la Barcelona, ​​el Área Metropolitana y la Catalunya del futuro", ha subrayado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, encargado de cerrar el acto. Antes que él, el alcalde de la capital, Jaume Collboni, había puesto este proyecto como ejemplo de todo lo que puede conseguir el país cuando las instituciones colaboran y van juntas. La firma solemniza el acuerdo alcanzado hace un año por todas las instituciones, pero todavía no incluye ni el calendario de ejecución ni el presupuesto.

El acuerdo de hace un año para llevar la ampliación del Clínic a las pistas deportivas de la UB llegó después de dar muchas vueltas –se descartaron antes hasta seis emplazamientos– y de unas negociaciones que se habían alargado dos décadas. Además de dar aire a un hospital que se ha hecho pequeño y que está "viejet", según ha reconocido este mismo lunes el director general del Clínic, Josep Maria Campistol, la ampliación debe permitir repensar el espacio que ocupa actualmente el Clínic y liberará algunos espacios clave en la ciudad.

El traslado permitirá construir "uno de los campus biomédicos más importantes de Europa" y sobre todo resolverá la fragmentación del hospital, ahora con instalaciones esparcidas por todo el Eixample, y el apelmazamiento en el edificio de la calle Villarroel , que, pese a la reubicación de algunos servicios, se mantendrá como centro de referencia para el distrito.

Tanto Campistol como el rector de la UB, Joan Guardia, han celebrado la colaboración entre instituciones que finalmente ha conseguido tirar adelante este proyecto, y han reivindicado que la apuesta contribuirá a convertir a Cataluña en "un polo de referencia internacional en el ámbito sociosanitario".

Aragonès y Collboni han subrayado que el proyecto no es "una seta", sino que dialoga con muchas otras iniciativas que se están llevando a cabo en el área metropolitana y que deben consolidarla como uno de los principales núcleos de investigación en Europa. Entre ellos está elapuesta por la Ciutadella del Conocimiento o el Caja Research Institute, enfocado a la inmunología del cáncer y el Alzheimer.

Ampliar la línea 3 del metro

El traslado del Clínic debe comportar una suerte de efecto dominó de inversiones y proyectos. Uno de los más destacados debe ser la ampliación de la línea 3 del metro, que ahora finaliza en Zona Universitària y que, tal y como ha recordado Collboni, debería alargarse para dar servicio a esta zona fronteriza entre Barcelona, ​​Esplugues y Hospitalet. Además, también desbloqueará el futuro de la Escuela Industrial como centro de innovación, liberando espacios y abriéndola más en el distrito del Eixample.