Así funciona la UAB después del ataque informático: vuelven las pizarras y no se utiliza internet
El centro sigue trabajando para normalizar la actividad pero prevé alteraciones durante toda la semana
BarcelonaDos días después del ataque informático a la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), este miércoles la mayoría de facultades han retomado las clases presenciales pero con limitaciones: como si el campus hubiera retrocedido dos décadas en el tiempo, no se usa internet, en la mayoría de aulas se ha optado por volver a las pizarras o a las presentaciones en PowerPoint y los estudiantes pueden optar por tomar apuntes a mano o por llevar el ordenador portátil, pero sin conexión a la red.
Los técnicos informáticos siguen trabajando para limpiar el sistema y normalizar la actividad tan pronto como se pueda. A medida que se compruebe que los espacios virtuales de las diferentes asignaturas y facultades son seguros, volverán a funcionar, pero la previsión es que las alteraciones sigan toda la semana. Fuentes del centro admiten que la afectación más grande es para los estudiantes, que tenían parte de los apuntes en el Campus Virtual, ahora inoperativo, y que tenían que entregar trabajos online. Los plazos se han flexibilizado y se alargarán. Tampoco se pueden hacer las reuniones virtuales internas o con otras universidades, que se han aplazado.
A diferencia de lo que habría pasado hace veinte años, sin embargo, la UAB ha aprovechado las redes para informar a los alumnos sobre la reanudación de las clases y el funcionamiento de la universidad mientras dure la incidencia por el ataque. Cada facultad ha utilizado su cuenta en Twitter para explicar cómo retoma la actividad, algunas han abierto cuentas en Telegram y, en general, se ha colgado un documento de preguntas frecuentes para resolver las principales dudas y emitir recomendaciones al profesorado y a los estudiantes. También se ha habilitado un código QR que está colgado en las facultades con la información.
En general, profesores, personal administrativo y alumnos pueden usar los portátiles, pero desconectados de la red y preferiblemente en modo avión. Lo mismo pasa con los móviles y las tablets. En el aula se pueden usar los proyectores pero se recomienda que si se tiene que hacer una presentación en formato digital se lleve en un lápiz de memoria, y que después se formatee y se pase un antivirus. Las clases en las aulas de informática se han adaptado y estos días se harán sesiones teóricas en lugar de prácticas. El correo y las herramientas telemáticas también funcionan pero solo en los ordenadores que ya tenían la sesión abierta, porque si no no es posible identificarse como usuario.
La tónica general es intentar volver a la normalidad. Por ejemplo, la Facultad de Traducción mantiene el acto de inauguración del curso académico, una charla con el jefe de accesibilidad de Google en Europa, Christopher Patnoe. En la Facultad de Ciencias de la Comunicación se hacen los laboratorios audiovisuales, pero los ordenadores de los platós de TV y de los estudios de radio no tienen acceso a la nube y solo funcionan en local.
La universidad también ha puesto en marcha una nueva página web que funcionará de manera temporal mientras dure la incidencia, pero su capacidad es limitada. También se recomienda a todos los usuarios que si detectan en sus cuentas un archivo con la extensión .uab apaguen el sistema y se pongan en contacto con los técnicos del centro.