Joan Subirats deja el Ayuntamiento y provoca una remodelación del equipo de Colau
El catedrático de ciencias políticas se jubila de la actividad pública a los 70 años y será sustituido por Jordi Martí en Cultura
BarcelonaJoan Subirats, el teniente de alcaldía de Cultura y Educación y persona de confianza de la alcaldesa Ada Colau, se marcha del Ayuntamiento de Barcelona, coincidiendo con que acaba de cumplir los 70 años y con que a finales de mes le llega la jubilación forzada de la plaza como catedrático de ciencias políticas. La suya es una renuncia esperada porque hacía tiempo que Subirats se planteaba su continuidad en política, pensando que le había llegado la hora de poner un punto y aparte a su intensa vida social y política, y no responde a tensiones entre los socios de coalición ni desgaste en la relación personal con Colau.
Este miércoles la propia Colau dará una rueda de prensa para explicar los cambios que la dimisión, avanzada por La Vanguardia, la obliga a hacer en el organigrama municipal. En dos mensajes en Twitter, Subirats ha explicado que el paso es voluntario y cierra una “apasionante tarea” de gobierno. “No dimito de nada. Han sido cuatro años de intensa actividad al servicio de la ciudad y de su gente. Seguiré vinculado al proyecto político del municipalismo y de Barcelona en Comú que representa Ada Colau, que hace tiempo que conocía mi decisión y a la que agradezco su apoyo y amistad”, ha escrito.
Colau confiará la cartera de Cultura a Jordi Martí, otro miembro de su núcleo duro en el consistorio, y que hasta ahora se encargaba de confeccionar los presupuestos. Martí tomará el relevo de Subirats en Cultura, una área de la que puede presentar credenciales. Con el carné socialista, fue el responsable del Institut de Cultura de Barcelona y responsable de la cartera, primero a las órdenes de Joan Clos y después de Jordi Hereu, de quien tomó el relevo en el liderazgo del PSC cuando este se retiró de la política, en 2012. En la remodelación entra en el gobierno municipal Pau González, consejero por los comuns en el distrito de Horta-Guinardó.
La complicidad entre Subirats y Colau es total desde que coincidieron en las plazas como activistas durante las protestas del 15-M. De esas luchas y debates en las calles, el catedrático salió como el mentor que dio fortaleza ideológica a los jóvenes activistas, que después dieron el paso de los movimientos sociales a la política institucional. Subirats ya apadrinó a Guanyem Barcelona, origen de comuns, y las siglas que los volverían a unir en la etapa de gestión en el Ayuntamiento de la capital catalana.
La alcaldesa lo nombró comisionado de Cultura en 2017 durante su primer mandato en el Ayuntamiento, cuando los comuns se quedaron en solitario en el gobierno una vez se rompió la coalición con los socialistas de Jaume Collboni por su apoyo a la aplicación del 155.
En las siguientes elecciones, Colau llevó a Subirats como número dos de su candidatura y, en la presentación del fichaje, la alcaldesa destacaba su talante negociador y la voluntad de llegar a consensos. Una mano tendida que podría compensar su falta absoluta de experiencia en la gestión pública, después de años en el mundo universitario.
Profesor de varias generaciones de periodistas y de politólogos en la UAB, Subirats es un hombre de ideas y del debate de las teorías políticas, experto en desigualdades sociales, ha hecho de la Bienal del Pensamiento una gran ágora para la discusión de la sociedad que viene, y ha impulsado la investigación y divulgación científica como parte de la cultura, y el enlace entre cultura y educación.