La movilización contra el exceso de tránsito sale de Barcelona
Diversas acciones festivas cortan la N-150 en Sabadell y Barberà del Vallès, la N-II en Premià de Mar y la calle Aragó
La protesta ha vuelto a la calle Aragó de Barcelona, que es el ejemplo de todo aquello que el movimiento contra el exceso de tránsito pide cambiar: una vía rápida para cruzar la ciudad por el medio del Eixample de un extremo al otro. Pero esta vez ha tenido su réplica en tres municipios más: Premià de Mar, Sabadell y Barberà del Vallès. También se tenía que dejar oír en Olot, donde, finalmente, la situación epidemiológica ha hecho más aconsejable aplazar la concentración a la carretera de la Canya. En todos los casos, la reivindicación era la misma: eliminar carriles de tránsito privado, ampliar aceras y dar espacio a los transportes más sostenibles en las vías que pasan por el medio de las localidades. Que pasen a ser calles y no carreteras, se llamen N-150, N-II o calle Aragó. La protesta, que ha llenado calles -o carreteras- de música y de juego, se repetirá cada último domingo de mes y se hará en paralelo a la que ya impulsan las familias en los entornos escolares una vez cada dos semanas.
"Hoy éramos más que la última vez", celebra Cristina Ribas, de la plataforma Recuperem Baix Maresme, que este domingo ha cortado la N-II delante de la estación de Rodalies de Premià de Mar. La protesta de este colectivo, que se hizo fuerte inspirándose en la idea de Barcelona de promover cortes de tránsito de fin de semana, se ha ido repitiendo en diferentes poblaciones de la comarca afectadas por el mismo problema: el paso de la N-II. "Ahora que todo el mundo sale más a pasear, ves el paseo Marítimo llenísimo y los coches con una sola persona dentro circulando a sus anchas por la Nacional. No tiene ningún sentido", remarca.
Hoy lo han denunciado con música y con la coreografía que les regaló el coreógrafo Miquel Barcelona para evidenciar que la suya era una protesta colectiva, una acción que hacían todo juntos, y que ya han convertido en un clásico de sus protestas. En la movilización del Maresme, además del exceso de tránsito, también se denuncia la accidentalidad en esta vía. La plataforma critica especialmente que el proyecto que el Consejo Comarcal ha encargado para hacer un carril bici entre Montgat y Blanes lo haga pasar por el paseo Marítimo compartiendo espacio con los peatones, y no por la N-II. "No está todo perdido, porque es un estudio previo, pero queremos el carril bici por la Nacional", apunta Ribas, que asegura que no cesarán en su reivindicación para conseguir que cuando venza la concesión del peaje de la C-32, en agosto, ya haya un estado de opinión consolidado que crea que este es el espacio de los coches y que la N-II puede ser para la gente.
La movilización contra las autopistas urbanas también se ha dejado oír, este domingo, en la N-150 en su paso por Barberà del Vallès y por Sabadell. Las plataformas Barberà Respira y Moviment Veïnal del Sud lamentan que los coches circulen por esta vía dentro de los municipios con "el mismo chip" que si lo hicieran por la autopista y piden que "deje de ser una carretera y sea una calle", con menos carriles de tránsito privado y aceras más anchas.
En Barcelona, donde viernes ya hubo cortes cerca de las escuelas para pedir más pacificaciones, la reivindicación se ha centrado hoy en la calle Aragó, con dos cortes simultáneos: entre Balmes y Aribau y entre Independència y Dos de Maig. La plataforma Eixample Respira recuerda que el gobierno de Colau se comprometió a hacer un corte mensual en esta vía y que esto ahora ha quedado enterrado. Si no lo hace el consistorio, dicen, lo harán ellos: cada último domingo de mes. "La ciudadanía está reclamando claramente unos cambios en las ciudades que traigan más salud y bienestar, y esto pasa inevitablemente por reducir el espacio del vehículo motorizado”, ha defendido el portavoz de la plataforma, Guille López, en declaraciones a los medios.