La OMS alerta de que la vacunación infantil se ha estancado
Los pediatras españoles recuerdan la importancia de inmunizar a las criaturas contra el sarampión
BarcelonaLa pandemia de la Covid-19 impulsó –con una velocidad sin precedentes– el desarrollo y distribución de las vacunas contra el coronavirus, pero, al mismo tiempo, se caracterizó por una caída significativa en la tasa de vacunación sistemática, es decir, las incluidas en los calendarios pediátricos. Según los datos publicados este lunes por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, la cobertura mundial de inmunización infantil se estancó en el 2023, lo que implica que este año habrá otros 2,7 millones de niños y niñas sin vacunar o sin recibir la totalidad de las vacunas necesarias en comparación con los niveles de 2019, anteriores a la pandemia. "Las últimas tendencias demuestran que en muchos países hay demasiados niños sin vacunar", ha afirmado la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, en la presentación del informe. "Cerrar la brecha de inmunización requiere un esfuerzo mundial", ha añadido.
La publicación sobre la cobertura nacional de inmunización (Wuenic, por sus siglas en inglés) es el mayor conjunto de datos del mundo sobre las tendencias de vacunación contra 14 enfermedades. Según detalla el informe, el número de niños que en 2023 recibieron las tres dosis contra la difteria, el tétanos y la tos ferina (DTP3) –un marcador clave de la cobertura mundial de inmunización– se mantuvo estable en el 84%, lo que representa a 108 millones de niños. Se trata de la misma cifra que en 2022, pero retrocede respecto al 86% registrado en 2019.
"Uno de los problemas que se ha observado es el gran impacto que tuvo la cóvida a la hora de mantener los niveles de vacunación frente a otros patógenos y, en algunos casos, ha disminuido la cobertura vacunal, con niños que no han recibido ninguna dosis o la pauta completa de algunas vacunas", explica la investigadora del Cinbio y catedrática de inmunología de la Universidad de Vigo, África González, en declaraciones a Science Media Centre (SMC). "La pandemia hizo que los recursos sanitarios se dedicaran fundamentalmente a la covid. Se suspendieron muchas campañas en países con escasos recursos, y la vigilancia epidemiológica también disminuyó", explica al ARA el pediatra y portavoz de la Asociación Española de Vacunología (AEV), Ferran Moraga-Lobo.
Asimismo, los datos también muestran que el número de niños que no recibieron ninguna dosis de la vacuna DTP3 aumentó de 13,9 millones en 2022 a 14,5 millones en 2023. En conjunto, los datos suponen un retroceso respecto a los objetivos marcados por la Agenda de Inmunización 2030, que pide que se alcance una cobertura del 90% para las vacunas esenciales en niños y adolescentes y se reduzca a menos de 6,5 millones la cifra de los niños con " dosis cero" en todo el mundo de cara al 2030.
Alerta por la reemergencia del sarampión
Los datos también evidencian un estancamiento de las tasas de vacunación contra el sarampión, una enfermedad que puede ser mortal, con lo que hay casi 35 millones de niños sin protección o sólo con protección parcial. El año pasado, sólo el 83% de los niños y niñas de todo el mundo recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión, mientras que el número de niños que recibieron la segunda dosis aumentó ligeramente con respecto al año pasado, situándose en el 74%. En Cataluña los porcentajes suben al 94,5% en la primera dosis y al 91,8% en la segunda. "La cobertura del sarampión es lo más destacado en este estancamiento de la vacunación –subraya Moraga-Llop–. Después de la pandemia, tanto en el mundo como en Europa, como en España, el sarampión ha reemergido, y lo ha hecho de formas muy diferentes según las coberturas vacunales de los países", añade.
Según datos del ministerio de Salud, entre enero y el 11 de junio de 2024 en España se han notificado 106 casos de sarampión. El año pasado se confirmaron sólo 14. "Hay una diferencia. No debe generar alarma, pero debe ser motivo de alerta y de preocupación. No estamos logrando las coberturas fundamentales", insiste el portavoz del AEV. Y sigue: "Si en algún momento dado hay una reemergencia muy importante en Europa y los países vecinos, habrá grupos de gente susceptibles". Para el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, este problema tiene solución. "La vacuna contra el sarampión es barata y puede administrarse incluso en los sitios más difíciles", aseguró. Sin embargo, en los últimos cinco años, los brotes de sarampión han afectado a 103 países, donde viven aproximadamente tres cuartas partes de los lactantes del mundo, y en los que la baja cobertura de vacunación (80%) ha tenido una influencia considerable.
Menos cobertura en países frágiles
Los datos también demuestran que más de la mitad de los niños sin vacunar viven en 31 países "con contextos frágiles, afectados por conflictos y vulnerables", donde son especialmente sensibles a enfermedades. "Los nuevos conflictos activos en ciertas regiones de Europa y el Mediterráneo oriental anticipan un empeoramiento de las condiciones para que su población acceda a servicios sanitarios e inmunizaciones. El caso de la población de Gaza y otras zonas de la región es especialmente doloroso", avisa al pediatra y colaborador del comité asesor de vacunas de la Asociación Española de Pediatría, Ángel Hernández Merino, en declaraciones a SMC.
Pero incluso en España existen diferencias entre comunidades autónomas, ciudades y barrios, apunta Moraga-Llop, que añade "Hay que hacer campañas y estrategias para promover la vacunación en lugares concretos". Por otra parte, el informe también muestra que 6,5 millones de niños no recibieron la tercera dosis de la vacuna de la tos ferina, necesaria para conseguir protección frente a la enfermedad durante la lactancia y en los primeros años de vida.
Aumenta la cobertura contra el papiloma
El informe también pone luz a datos más optimistas: la introducción constante de vacunas nuevas e infrautilizadas, incluidas las del virus del papiloma humano (VPH) y las de la meningitis, el neumococo, la poliomielitis y el rotavirus, sigue ampliando el su alcance de protección. Por ejemplo, la proporción de niñas adolescentes a escala mundial que recibieron al menos una dosis de la vacuna contra el VPH –que proporciona protección contra el cáncer de cuello uterino– aumentó del 20% en 2022 al 27% en 2023, y volvió a niveles cercanos a los de antes de la pandemia. Sin embargo, la cobertura de la vacuna contra el VPH está muy por debajo del objetivo del 90%, ya que sólo alcanza el 56% de las adolescentes en los países de ingresos altos y el 23% en los países de ingresos bajos y medios.