Crimen de Horta: un padre mata a los hijos y se suicida
El hombre habría encendido un brasero y sellado el piso para impedir la renovación del aire
Barcelona[La principal hipótesis de los Mossos d'Esquadra el día del crimen fue que el padre se había suicidado y había matado a sus dos hijos intoxicándolos con un brasero. El ARA contrastó esta información con diversas fuentes directamente vinculadas a la investigación y logró apuntar todos los detalles que llevaban a los Mossos a esta hipótesis. Con el tiempo, la investigación policial no ha podido comprobar que el padre fuera el autor de la muerte de los hijos y se ha concluido que fue un accidente, por eso la jueza ha terminado archivando el caso. Igualdad también ha excluido la muerte de los dos niños de la lista de víctimas de violencia vicaria.]
Los Mossos d'Esquadra encontraron muertos el lunes a un hombre ya sus dos hijos menores de 10 años en un piso en el distrito de Horta-Guinardó de Barcelona. La principal hipótesis policial es que, aprovechando que pasaban unos días con él en Navidad, el padre habría matado a su hijo e hija y se habría suicidado. Se llamaban Xavi y Noa y tenían 10 y 7 años. Fuentes cercanas al caso explican que cuando los agentes llegaron al piso olía mucho a gas y estaba completamente sellado. Según las mismas fuentes, todo apunta a que el hombre encendió un brasero y puso ropa bajo las puertas para sellar el piso y que no se renovara el aire. Los tres, padre e hijos, estaban en la misma habitación.
Los Mossos investigan si se trata de un caso de violencia vicaria. Es decir, si el padre mató a los niños para hacer daño a la madre. Por el momento, no hay ninguna llamada, mensaje o comunicación previos que apunten en esa dirección, como podría ser una advertencia del padre. Pero la investigación apenas arranca. Al mismo tiempo, será la autopsia la que determine la causa de la muerte de los niños y del padre. O si, en el caso de los pequeños, se les suministró algún tipo de sedante. Fuentes consultadas por el ARA descartan que los cuerpos de los menores tuvieran signos de violencia. Las primeras hipótesis apuntan a una intoxicación por monóxido de carbono producido por la combustión de algún material en el brasero.
Cuando los Bomberos entraron en el piso detectaron que en lugar de gas se trataba de monóxido de carbono, según fuentes cercanas al caso. Las mismas fuentes explican que el hombre y la madre de los niños estaban separados, aunque era de mutuo acuerdo y no existía un procedimiento en el ámbito civil abierto. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha explicado en un comunicado que tampoco existían antecedentes de violencia entre el hombre y la madre de los pequeños. El juzgado de instrucción número 26 de Barcelona, en funciones de juzgado de guardia de incidencias, se ha hecho cargo de la investigación.
Los agentes se presentaron el lunes por la tarde en el piso del padre después de que la madre de las criaturas diera el aviso, sobre las 18 h, de que su expareja, con quien no podía contactar, no le había devuelto a los niños después de Reyes y que tampoco los había llevado a la escuela. El aviso de la madre llegó en paralelo con una alerta de los vecinos, que llamaron al teléfono de emergencias por la tarde alertando de que la finca olía mucho a gas.
Violencia vicaria
Dentro de los casos de violencia vicaria se engloban las agresiones mortales y no mortales de los padres a sus hijos por dañar a la madre. El primer caso de un asesinato de este tipo en Cataluña es el de Leo, el niño de 2 años al que su padre mató en un hotel de Barcelona en agosto del 2021. Desde entonces no se había producido ningún otro con una víctima mortal. De confirmarse esta hipótesis en el doble crimen de este lunes en la capital catalana, se trataría también del primer asesinato de violencia vicaria del 2024 en todo el Estado. Desde el 2013, cuando se reconocieron a los menores como víctimas de la violencia machista, ya son 50 los asesinados por los progenitores hombres, según los datos hasta el 27 de noviembre del 2023 que recoge la delegación del gobierno contra la violencia de género del ministerio de Igualdad. En esta estadística no se recogen todos los casos de violencia contra los hijos porque queda fuera la ejercida por las parejas o por la madre, como el caso de Yaiza, la menor de 4 años a quien su madre mató a Sant Joan Despí en el 2021.
La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha condenado los hechos este martes: "Son unos hechos trágicos y dolorosos, que consternan la sociedad catalana, que nos llenan de impotencia por no haber podido evitarlo y nos enrabietan”, ha dicho en la rueda de prensa posterior al consejo ejecutivo. También ha definido la violencia vicaria como "la más extrema". que se puede ejercer hacia una mujer, hacia una madre". La consejera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge, ha afirmado que no hay "palabras para expresar el dolor y la rabia". "Xavi y Noa tenían derecho a vivir sin violencias machistas. Podrían ser nuestros hijos e hijas", ha dicho después de un minuto de silencio en la plaza Sant Jaume de Barcelona.
Tres años viviendo en este piso
Según han explicado los vecinos al ARA, llevaba unos tres años viviendo el hombre en estos bajos de un bloque de dieciséis pisos en el distrito de Horta-Guinardó y cuando se mudó durante la pandemia ya estaba separado de la pareja . Los vecinos, de hecho, explican que sólo habían visto a la mujer cuando iba a llevar oa pasar a buscar a los niños a casa de su padre. De hecho, según fuentes vecinales, antes de que llegara la policía la madre había ido a la entrada del bloque después de que la escuela le hubiera informado de que sus hijos no habían ido. Mamá llamó al timbre reiteradamente y gritó. Instantes después llegaron los Mossos y le prestaron la primera asistencia psicológica.
Hasta el lugar se desplazaron cuatro unidades de apoyo avanzado y un equipo de psicólogos del Sistema de Emergencias Médicas, así como dos dotaciones de Bomberos, dos de la Guardia Urbana y cinco de los Mossos entre seguridad ciudadana, investigación y policía científica . La actuación de los cuerpos de emergencias y de la comitiva judicial se prolongó más de tres horas. Hacia las 21 horas llegaron los servicios funerarios para trasladar los cuerpos.