Tres muertes en Ceuta: un joven marroquí muere al caer de un muro de 10 metros en el puerto

BarcelonaUn joven inmigrante ha muerto este sábado en el Hospital Universitario de Ceuta después de caer desde una altura de 10 metros en el puerto de la ciudad. Según han informado fuentes policiales, el joven estaba con otros compatriotas en el muelle de la Puntilla, donde esperan muchos de los inmigrantes para subir en uno de los barcos atracados en el puerto ceutí y atravesar a escondidas el estrecho de Gibraltar para entrar en la Península. Por causas que se desconocen, el chico se precipitó al vacío y, a pesar de que una ambulancia del 061 intentó estabilizarlo antes de ser trasladado al hospital, tenía un fuerte traumatismo craneal y ha acabado muriendo, según Europa Press.

En total, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria ceutí ha atendido a 516 inmigrantes esta semana, tres de los cuales han necesitado ingresar en el hospital por varias causas, entre los que están el joven que ha acabado muriendo. Otro es el inmigrante marroquí que intentó suicidarse en un puente en la frontera de Tarajal y el tercero también es un joven marroquí a quien han golpeado con un bate de béisbol en la calle. No se ha hecho todavía detenciones por la agresión.

Desde el inicio de la crisis migratoria de esta semana, por las redes han circulado vídeos de personas amenazando a migrantes que continúan deambulando por Ceuta. La Policía Nacional tiene identificados al menos uno de los autores de una agresión.

Dos fallecidos ahogados

En la playa de Tarajal, la Guardia Civil ha recuperado desde lunes dos cadáveres, los dos de jóvenes de Marruecos que habrían muerto ahogados intentando entrar nadando a la ciudad española. Al primer inmigrante que murió lunes, de 19 años, lo han enterrado este sábado en Ceuta según el ritual musulmán. Jueves por la tarde se había encontrado en el mar el cuerpo sin vida de un menor de 16 años.

En paralelo, el ministerio del Interior ha reforzado los efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en Melilla con 90 agentes –50 policías nacionales y 40 guardias civiles– para proteger la frontera.