Adrià Salas e Inés Hernand, una historia digna de comedia romántica

En septiembre de 2019, Adrià Salas celebraba los 16 años de La Pegatina cuando, en pleno concierto en Madrid, se dislocó la rótula. Faltaban pocos meses para que estallara la pandemia y el músico se vio obligado a encerrarse en casa con la pierna escayolada. El primer día que salió a la calle con las muletas, dos meses después del concierto, fue el día que conoció a la que sería su pareja, la humorista Inés Hernand.

“Yo había ido al CCCB a unas charlas sobre el humor de las nuevas generaciones, el Memefest, y a la salida me retrasé un poco por culpa de las muletas”, explica el cantante. Fue entonces cuando vio que una chica lo miraba como si se conocieran de algo. “Me pasa a menudo; con el grupo conocemos a tanta gente que ya no sé a quién conozco y quién no, me suenan las caras, pero no sé asociarlas”. Así que Salas se acercó a la chica y le dijo: “Disculpa, me estás mirando como si te tuviera que conocer y no estoy seguro de que te conozca. ¿Me podrías decir de qué nos conocemos?”. Rápidamente, Hernand le explicó que él no la conocía, pero que ella sí: “Yo estaba en el concierto donde te rompiste la pierna”, le dijo.  

Durante unos minutos hablaron sobre música, pero Salas tenía que irse con sus amigos y enseguida se despidieron. Intrigado todavía por aquella chica a la que no conocía de nada, pidió a uno de los amigos que volviera atrás para ver si la encontraba. Pero Hernand había desaparecido y Salas no tenía manera de contactar con ella.

O al menos esto es lo que creía entonces. El día siguiente por la mañana le enviaron unas historias de Instagram donde una humorista famosa explicaba que se había topado con el cantante de La Pegatina, su crush desde hacía tiempo. La humorista era Inés Hernand, y fue en aquel momento que Salas descubrió que quien lo había seducido era una influencer. 

Empezaron a compartir memes a través de Instagram hasta que él le preguntó si le apetecería presentar en Madrid el poemario que el músico acababa de publicar. Hernand aceptó y la noche antes del acto salieron juntos hasta las tantas. “No pasó nada, pero nos gustamos”, detalla Salas. Lo que podía parecer el principio de una historia romántica topó con un obstáculo que no esperaban: “Llegó la pandemia y se acabó todo”. 

Tuvo que pasar un año para que Hernand propusiera al músico escaparse juntos a la montaña, en julio de 2020. Después de dos semanas de rutas y excursiones en el Pirineo, donde surgió el amor, ella se compinchó con un amigo y se plantó con la mochila en casa del cantante. Ya no pensaban esperar más: “Adri, vengo a Barcelona porque quiero ser tu novia”.