Muere Richard Serra, autor de las monumentales esculturas de acero del Guggenheim de Bilbao
Ha muerto en su casa de Long Island, en Nueva York, a causa de una neumonía
BarcelonaEl escultor minimalista estadounidense Richard Serra, mundialmente famoso por trabajar con piezas de acero monumentales, ha fallecido a los 85 años. El artista traspasó a su casa en Long Island, en Nueva York, a causa de una neumonía, según informó su abogado, John Silberman, al diario The New York Times.
Nacido en San Francisco (California) en 1938 en una familia de padre mallorquín y madre ucraniana, Serra es considerado uno de los escultores más importantes de la vanguardia del siglo XX. Su obra está presente en los museos más importantes y en colecciones de todo el mundo, como el Guggenheim de Bilbao.
Richard Serra estudió en la Universidad de California en Berkeley y se graduó en filología inglesa en 1961. Mientras estudiaba, trabajaba en acerías para poder ganarse la vida. La relación con estos materiales marcaría en parte su carrera artística. El escultor es uno de los artífices de la recuperación de algunos de los valores que acompañan a la escultura: la masa, la monumentalidad y la voluntad de permanencia. Además reformuló la relación entre escultura y espacio. Sin embargo, rehuía el pedestal y un único punto de vista central. Obras como Plunge (1983), T-Junction (1988) y Anvil (1988) ilustran esta noción de la ocupación espacial y un predominio de la verticalidad. De hecho, el artista defendía que la mayoría de sus piezas debían verse desde arriba. "Cuando construyes una obra que pesa 100 toneladas tienes otros códigos", afirmaba.
La controversia sobre el espacio
No todo el mundo ha entendido el punto de vista del artista. En 1979, la United States General Services Administration (GSA) encargó a Serra, entonces un artista ya conocido, una escultura que debía instalarse en la Federal Plaza de Manhattan, un amplio espacio de Foley Square situado justo en frente del Jacob K. Javits Federal Building, uno de los edificios estatales de oficinas más grande y emblemático de Estados Unidos. La escultura titulada Tilted arco (Arco inclinado) se instaló en 1981, después de largas negociaciones. Se trataba de un inmenso muro de acero patinable, que interrumpía el espacio de la plaza con sus 38 metros de longitud y 3,84 de altura. Partía literalmente el espacio en dos, por lo que obligaba a los transeúntes a realizar nuevos recorridos y relacionarse con el lugar de manera completamente diferente a cómo estaban acostumbrados.
La obra es un buen ejemplo de la innovación y de los conceptos que Serra defendía, pero también de lo controvertido que podía ser. No representaba lo que la mayoría estaba acostumbrado: un momento o figura histórica. Era enorme y daba la sensación de inestabilidad, porque tenía una ligera inclinación. Además, el tipo de acero estaba hecho para que se oxidara, adquiriendo, por tanto, rápidamente el aspecto de desecho o chatarra. Había también una dimensión simbólica: Serra señalaba la desigualdad entre los trabajadores. Después de años de controversia, la escultura se desmontó el 15 de marzo de 1989. Se reunieron más de 4.000 firmas solicitando la retirada de la pieza, con el argumento de que el arte no debe ofender al público que paga por él y que retener una obra en contra de su deseo interferiría en la libertad de expresión. Serra luchó contra la decisión en los tribunales hasta que se agotaron todas las vías de apelación. Él defendía que retirarla de ese lugar sería destruirla.
El muro de la Verneda
En esa misma época, ya petición del alcalde de Barcelona, Narcís Serra, Richard Serra instaló una obra en la plaza de la Palmera, en el barrio de la Verneda, en 1984. Conocida como El muro, la formaban dos semicírculos de pared blanca de 2 metros de altura. Una de las obras más interesantes de Serra se encuentra en Bilbao, donde el Museo Guggenheim inauguró en 2005 La materia del tiempo, una instalación de ocho piezas; y otra obra suya, Pentágono en sentido contrario a las agujas del reloj, se colocó en la entrada del Museo de Bellas Artes de Bilbao, junto con Lugar de encuentros IV de Eduardo Chillida. En Madrid había Igual-paralelo: Guernica-Bengasi, que fue creada específicamente para el Museo Reina Sofía con motivo de la exposición Referencias. Un encuentro en el tiempo, que inauguró el equipamiento madrileño en 1986. La obra, que pesaba 38 toneladas, se perdió. La depositaron en un almacén y de ahí desapareció sin que nadie pudiera explicar qué pasó. En 2009, Serra hizo una copia, sin cobrar los honorarios, para que pudiera volver a las salas del museo.
En 2011, el Metropolitan Museum of Art de Nueva York inauguró la primera retrospectiva dedicada a los dibujos del artista, que posteriormente viajó al San Francisco Museum of Modern Art ya la Menil Collection (Houston, Texas). Ese mismo año se publicó Richard Serra. Escritos y entrevistas 1972−2008, una antología de entrevistas y escritos del escultor. El artista fue galardonado con el premio Príncipe de Asturias en 2010.