El cabaret desgarrado de Albert Serra, Ingrid Caven y Els Moltforts
La banda banyolina que pone música a las películas del director actúa con la actriz y cantante alemana en el festival Temporada Alta
- Festival Temporada Alta.
- Teatro de Salt. 6 de diciembre de 2023.
Todos los artistas que rondan el entorno creativo de Albert Serra comparten de forma natural un gusto especial por la improvisación, el experimento y la exploración de nuevos lenguajes. Es el caso de los Molforts, un grupo de cinco músicos banyolins, autores de las bandas sonoras del cineasta, para los que Serra ha concebido un original espectáculo musical. Se trata de una propuesta transgresora y atrevida, en la frontera entre el concierto y la performance sonora, en la que la banda sube al escenario para acompañar a la legendaria cantante Ingrid Caven, musa de Fassbinder, que interpreta sus últimas canciones.
La música que los Molforts producen para las películas de Serra es sutil, leve y vaporosa, sin grandes melodías ni clímaxes culminantes, y genera una especie de paisajes auditivos que no buscan determinar la emoción de la imagen ni empastarla la, sino darle protagonismo desde un fondo sonoro que empapa y colorea. Y el mismo tono practican en su actuación con Ingrid Caven, resonando en cada canción como un subtexto que acompaña y ambienta la voz desde el aire. En el escenario, los músicos llevan sintetizadores, piano, percusión y muchas mesas de mezclas, todo ello para configurar una especie de niebla eléctrica, sin tonalidad ni partitura, que repite micromotivos rítmicos y melódicos, alternando cadenas de acordes muy sencillas.
Sobre esta base, Caven tiene toda la libertad para desahogarse, cantando versos en francés –y haciendo alguna declamación en alemán– de una quincena de canciones, sin necesidad de afinar ni cuidar el timbre o la emisión . Recuerda una actuación de cabaret desgarrado, flirtea con el espíritu juguetón de las canciones infantiles o incluso se atreve con saltos abruptos al estilo delsprechgesang vanguardista de Arnold Schönberg. La actriz, que sale en alguna escena erótica de Liberté, de Albert Serra, aquí también grita, silba, se eriza en la butaca, se estira en el suelo o balbucea, lo que provoca una sensación ambivalente de extrañeza y seducción, entre el divertimento, el misterio y el drama. La performance tiene fragmentos especialmente sugestivos, sobre todo cuando Caven toma las réplicas de Xavier Gratacós, miembro de la banda que proyecta una voz fondísima y sensual que hace de contrapunto a la monodía.
Serra, además de concebir la colaboración, también se ha encargado del diseño del espacio escénico: colgando del techo hay unas cortinas negras de lentejuelas, en algunos momentos, transporta al público a las actuaciones surrealistas del club nocturno de Twin Peaks.