La poción del Barça de fútbol que la sección de baloncesto no puede copiar

BarcelonaDespués de dos temporadas muy malas y con un escenario económico que no permite grandes inversiones, la sección de baloncesto del Barça necesita reinventarse. El gran problema es que el club blaugrana no puede competir con los grandes presupuestos europeos, pero tampoco puede imitar la estrategia que implementó en el fútbol, ​​cuando las limitaciones de caja sirvieron para acentuar la apuesta por los jugadores jóvenes. El nuevo escenario internacional permite a las universidades estadounidenses ofrecer contratos que la entidad culé no puede asumir. Esto provoca que los jóvenes con proyección se marchen cada vez antes a Estados Unidos. Las salidas de Kasparas Jakucionis y Dame Sarr serán imitadas por Mathieu Grujicic y Raúl Villar.

"Cuando ejercí el trabajo de director deportivo en el Barça las limitaciones económicas nos condicionaron mucho. No había dinero ni para el fútbol. La solución que encontramos fue apostar por jugadores jóvenes, y la estrategia nos funcionó muy bien. La clave fue imaginar al equipo que nos gustaría tener en el futuro", recuerda Eduard Portela. El problema es que con el escenario actual cualquier inversión en la cantera parece tener fecha de caducidad.

La ampliación de la Euroliga y la llegada de nuevos equipos con grandes presupuestos, como el Dubai BC y el Hapoel Tel-Aviv, obliga al Barça a mover ficha para no quedarse atrás, ya que la temporada ha sido muy decepcionante. El equipo azulgrana no pasó de los cuartos de final ni en la Copa del Rey ni en la Euroliga ni en la Liga Endesa. El conjunto culé ha acumulado 34 derrotas en una temporada en la que, por primera vez desde 1992, no ha llegado a ninguna semifinal de los tres grandes títulos a los que aspira.

Las lesiones y su nula respuesta han condicionado una temporada en la que el equipo ha acabado compitiendo con tan sólo nueve jugadores profesionales. "Ha sido un final durísimo, como toda la temporada. Los jugadores acabaron fundidos, muertos. Muchos jugadores no podían más, pero no teníamos alternativas para refrescar las piernas y las cabezas", dice Joan Peñarroya. El técnico egarense reconoce que los resultados no son buenos, pero quiere remarcar el esfuerzo del vestuario. "No es momento de hacer balance en caliente, pero es una obviedad de que el Barça no debe quedar eliminado en cuartos de final. El resultado no es lo que queríamos, pero deben analizarse muchas cosas que han pasado", dice el entrenador, que hará cambios importantes en su cuerpo técnico.

El Barça da por hecho que Chimezie Metu, Youssoupha Fall y Justin Anderson, que acaban contrato, no seguirán en el equipo. El club cuenta con Tomás Satoransky, Juan Núñez, Nico Laprovittola, Kevin Punter, Darío Brizuela, Joel Parra, Jabari Parker y Jan Vesely, que tienen contrato. "Los veranos siempre son importantes para definir cosas, ya tendremos tiempo de pensar lo ocurrido", resume Peñarroya. El Barça tiene apalabrados a dos jugadores, Toko Shengelia (Virtus Segafredo de Bolonia) y Myles Cale (Trento). El ala-pívot ya conoce la Liga Endesa y el escolta ha protagonizado una buena temporada en la Eurocup.

El resto de incorporaciones, que serán de perfil bajo, dependen de lo que ocurra con Àlex Abrines y Willy Hernangómez. Ambos tienen contrato en vigor, pero el club carece de clara su continuidad. El capitán medita qué hacer con su futuro y el pívot acabó desesperando a Peñarroya. El problema es que la vinculación que tiene con el club acaba en el 2026 y su salida no será sencilla.

"Dos años muy duros"

Juan Carlos Navarro, que se ha asegurado la continuidad de su mano derecha, Mario Fernández, da por hecho que Peñarroya seguirá ocupando el banquillo. "Hicimos un esfuerzo económico llevando a Raul Neto, desviándonos del presupuesto y con todo el tema del juego limpio financiero, pero nos ha salido mal. La situación del club es la que es, pero soy optimista", dice Navarro.

"Entiendo que los aficionados estén molestos, pero hemos hecho un esfuerzo gigante pese a las limitaciones presupuestarias", recuerda Navarro, que califica la temporada del equipo de aprobado. La mayoría de los hinchas no comparten la misma visión. Tampoco algunos jugadores. Uno de los que siempre habla claro es Joel Parra. "Sentimos frustración y rabia porque el partido del domingo fue un resumen de la temporada. Hemos luchado, pero no es una buena temporada para el Barça. No hablo sólo de no ganar ningún título, sino de las sensaciones. No es normal y debemos ser conscientes de ello. No diré lo que pienso porque serían cosas negativas. la afición, porque llevamos dos años muy duros", dice el alero catalán. El Barça ni siquiera disputará la Supercopa ACB la próxima temporada.