Alimentación

Plan de contingencia de la DO Cava para garantizar la producción pese a la sequía

Las empresas de la denominación vendieron 252 millones de botellas, un 1,1% más, y facturaron casi 2.200M€ en 2023

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Detalle de copas de cava.

BarcelonaLa denominación de origen (DO) Cava está estudiando la creación de un mecanismo para guardar vino para garantizar que, en años de baja producción de uva debido a la sequía, podrá sacar al mercado un mínimo de botellas. La DO ha presentado también los resultados de 2023, cuando cerró el año incrementando tanto el número de botellas vendidas como de la facturación.

"Venimos de una época en la que sobraba uva,", ha recordado Javier Pagés, presidente de la DO, sobre los años anteriores a la pandemia, tendencia que ha cambiado radicalmente, cuando la fuerte sequía que asola Catalunya –y especialmente el Penedès, donde se concentra la producción de cava– desde hace casi tres años ha tenido un efecto muy negativo sobre el sector. De hecho, según datos de la DO, entre 2021 y 2023 la producción de uva en las empresas del cava se redujo un 29%, mientras que en Cataluña la cifra rozó el 38%. "Ahora falta uva. Habrá carestía de producto", apuntó el presidente de los cavistas.

Ante esta situación, la DO estudia crear un mecanismo para garantizar que en "años malos" las empresas aún puedan comercializar botellas. El mecanismo consistiría en reservas de vino base para aguantar tres años, a partir del cual podría elaborarse cava nuevo. Pagés ha explicado que esta "previsión de garantía" todavía "no está aprobada" por los órganos rectores de la denominación.

Asimismo, Pagés ha apostado por la introducción de ciertos métodos de regadío para mantener los viñedos si la sequía persiste, aunque considera que este tipo de acciones "dependerán más del sector público" que de la iniciativa de las empresas vinícolas.

Crecimiento centrado en España

En cuanto a los resultados de 2023, el total de empresas del cava incrementaron un 1,1% el número de botellas vendidas, hasta los 252 millones. La facturación total fue de casi 2.200 millones de euros, un 8% más que un año atrás, aseguró Pagés. A finales del año pasado, el presidente de la DO vaticinó acertadamente que se superaría la cifra de 250 millones de botellas, récord histórico, aunque debido a la ralentización del mercado exterior las ventas de los últimos tres meses acabaron siendo inferiores a lo esperado.

De hecho, la subida de 2023 se debe sobre todo a la buena marcha del mercado español, en el que el volumen de botellas vendidas aumentó un 3,9% y el total facturado, un 10,6%. Esto responde, según Pagés, a la venta de más cavas de mayor calidad y, por tanto, más caros. Por el contrario, el volumen de botellas vendidas en el extranjero disminuyó un ligero 0,25%. En total, casi el 79% de los ingresos de la DO proceden de las ventas en el Estado.

La caída del mercado exterior se debe principalmente a la reducción de las exportaciones a Estados Unidos. Pagés ha atribuido a las fuertes exportaciones de 2022 el hecho de que EEUU haya sufrido un descenso del 13,5% respecto al año anterior, hasta los 21,6 millones de botellas. Por el contrario, Alemania se mantuvo como primer destino del cava, con 31,1 millones de botellas vendidas, mientras que Bélgica, con 22 millones y un incremento del 5,1%, superó a EEUU en la segunda posición. Pese a la consolidación del Brexit, Reino Unido fue el cuarto país al que más exportaron las compañías cavistas, con 16,8 millones y una subida de las ventas del 5,3%.

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