La banca cerró el 2023 con la rentabilidad por las nubes

MADRIDDefinitivamente, 2023 no fue un mal año para la banca española. Más allá de unas ganancias históricas, su rentabilidad –o estado de salud– se disparó. Así lo constata, de nuevo, el Banco de España: la rentabilidad sobre el capital (ROE, por sus siglas en inglés) se situó en el 12,4%, muy por encima de la rentabilidad registrada a finales de 2022, cuando era del 9,86% según datos del organismo supervisor.

La rentabilidad de un banco viene determinada por el coste de capital. Éste último es el retorno que un accionista espera obtener por el dinero que le ha dejado la entidad financiera. Se trata, pues, de una expectativa: lo rentables que son los ingresos que se consiguen. En los últimos meses, la banca española ha asegurado de forma generalizada que su rentabilidad no cubre el coste de capital. Esto significa que sus accionistas esperan recibir mucho más de lo que se les está devolviendo. Sin embargo, el organismo que preside Pablo Hernández de Cos reitera que este elemento "ha presentado una evolución muy favorable", tal y como se desprende de una nueva edición de laInforme de estabilidad financiera correspondiente a la primavera de 2024 y publicado este lunes.

Durante años, la banca española hizo manos y mangas para mejorar la rentabilidad, empezando por la reducción de sus costes a través del despido de un grueso de la plantilla. Con la crisis financiera y una política monetaria por parte del Banco Central Europeo (BCE) que situó los tipos de interés en el 0% e incluso en negativo durante años, los niveles de rentabilidad cayeron al suelo.

Pero con la subida de los tipos por parte del BCE, la banca ha visto cómo una pata de sus ingresos subía como la espuma: el margen de intereses –que proviene de todas las cuotas de los préstamos que devuelven los clientes y que han sido el negocio tradicional de la banca–. Es esto lo que explica la mejora de la rentabilidad. En concreto, según datos del Banco de España, en un contexto de ganancias récord, el crecimiento del margen de intereses en 2023 fue de un 22,4% en comparación con el ejercicio anterior. Por el contrario, "la traslación del endurecimiento de la política monetaria a los tipos de activo ha seguido siendo más intensa que a los tipos del pasivo [es decir, en los depósitos de los clientes], lo que sostiene el incremento de los márgenes unitarios", constata el organismo supervisor.

Prudencia por el nivel de solvencia

Pero no todo es valoraciones positivas. Pese a la mejora de la rentabilidad, el Banco de España sigue constatando que ésta no se ha traducido en un "fortalecimiento significativo" de la solvencia del sector. La solvencia es un indicador que permite determinar si los bancos tienen recursos suficientes para poder responder a un choque de su actividad, en particular al hecho de tener que afrontar pérdidas, sean previsibles o no.

El ratio de solvencia en el caso de los bancos españoles creció de forma "moderada" en el 2023, a diferencia de lo ocurrido en países del entorno, concluye el Banco de España. Fruto de ello, el organismo supervisor sigue recomendando hacer un uso prudente de los beneficios actuales para "reforzar la capacidad de absorber el impacto de potenciales pertubaciones macrofinancieras", sobre todo en un momento en el que los riesgos geopolíticos están en alza y la previsión es que los bancos centrales empiecen a poner el freno en lo que se refiere a los tipos de interés. A preguntas de si esto debería traducirse en una prudencia a la hora de repartir dividendos o aprobar recompras de acciones, el director general de Estabilidad Financiera, Ángel Estrada, ha recordado que "es importante que las entidades construyan capital" .

De hecho,

Revisión del impuesto

En cuanto al impuesto extraordinario en el sector, durante la presentación del informe Estrada ha reiterado que si se convierte en permanente habría que "mejorar" el diseño actual. "En una situación en la que no haya beneficios, el impuesto no se ajusta", ha dicho. De hecho, el gobernador del Banco de España ya ha enviado recomendaciones al gobierno de Pedro Sánchez para modificar su actual diseño.

Este lunes, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, también se ha mostrado favorable a adaptar el gravamen, tanto de la banca como de las energéticas: "Estamos haciendo una valoración de las necesidades y del ajuste potencial, si es que se hace permanente el impuesto, para que podamos aprovechar al máximo su potencial con un enfoque de equilibrio respecto a los sectores", ha dicho en un almuerzo informativo en Madrid.