CaixaBank alarga su momento dulce y gana 4.248 millones hasta septiembre

CaixaBank obtuvo un beneficio neto atribuido de 4.248 millones de euros hasta septiembre, un 16,1% más que en el mismo período del año pasado. La entidad bancaria ha explicado que el incremento de las ganancias se debe al "fuerte crecimiento de la actividad ya su elevada solidez financiera". Los recursos de los clientes han aumentado en 43.502 millones (lo que supone un 6,9% más) y la nueva producción de crédito avanza un 20% respecto a los nueve primeros meses de 2023.

Las cifras, comunicadas este jueves por la Comisión Nacional del Mercado de Valores, llegan un día después de la renuncia del presidente de la entidad bancaria, José Ignacio Goirigolzarri, que será sustituido por Tomàs Muniesa a partir del 1 de enero de 2025. CaixaBank también ha comunicado que el margen de intereses (el dato clave de los ingresos, porque provienen de los préstamos, el negocio clave de la banca ) sube en un 13,6%, y que el ratio de morosidad se mantiene en el 2,7%, un nivel históricamente bajo según la entidad. CaixaBank, además, superó los 635.000 millones de euros en volumen de activos y aseguró que ha mejorado su cuota de mercado en España.

El consejero delegado de la entidad bancaria, Gonzalo Gortázar, ha manifestado que en el tercer trimestre siguió la tendencia positiva de los seis primeros meses del año, con una "intensa actividad comercial, morosidad contenida, solvencia y liquidez muy por encima de los requisitos y una rentabilidad que ha alcanzado niveles razonables". Este trimestre ha ido marcado por el inicio de las caídas de tipos del BCE, que se iniciaron en junio, y por el momento Gortázar no fue del todo contundente sobre el impacto que ha tenido en el crédito: "Es pronto todavía, aunque como el mercado hipotecario se ha abaratado, ya estamos viendo un impacto en la actividad", ha explicado.

El consejo de administración del banco ha acordado la distribución de un dividendo a cuenta del 40% del beneficio neto consolidado del primer semestre de 2024, por un importe de 1.070 millones de euros (14,88 céntimos de euro) brutos por acción), que pagará durante el mes de noviembre.

Dura crítica al impuesto a la banca

Gortázar ha dedicado cinco minutos a contestar una pregunta sobre la decisión del gobierno de mantener el impuesto a la banca. El primer ejecutivo del banco catalán ha recordado que el momento de subida de tipos y las dificultades de las familias por la inflación ya queda atrás y que, por tanto, no queda claro a qué responde el impuesto. "No voy a entrar, pero por eso no es", ha dicho.

El consejero delegado ha lamentado la discriminación que supone esto para la banca, especialmente por los bancos españoles en su competencia con las entidades extranjeras con presencia en España, pero también respecto al conjunto de la economía. "Nos sentimos discriminados frente a todos los demás sectores", ha dicho, para celebrar a continuación la decisión de no alargar el impuesto a las energéticas. "Tenían la ventaja de que en su caso es muy visible el efecto de ahuyentar las inversiones", ha dicho sobre las empresas eléctricas y las petroleras.

El otro punto de interés de la rueda de prensa era la valoración que pudiera realizar Gortázar de la salida de Goirigolzarri. "Ha sido una decisión voluntaria y personal", ha insistido. También ha querido negar la hipótesis de que el adiós del financiero vizcaíno responde a una relación deteriorada con Gortázar. "He tenido, tengo y voy a seguir teniendo una relación magnífica con Goirigolzarri, ha sido un placer", ha dicho. El consejero delegado también ha manifestado que ha sentido siempre "la proximidad, el apoyo y los buenos consejos" del todavía presidente.