Demostración de fuerza del BBVA para comprar el Sabadell
La junta de accionistas aprueba, con un 96% de votos favorables, la ampliación de capital pese a las críticas de los sindicatos
BarcelonaSí rotundo. Los accionistas del BBVA han votado este viernes, por una abrumadora mayoría, a favor de la compra del Banc Sabadell. La junta del banco de origen vizcaíno, reunida en Bilbao para discutir la cuestión, ha aprobado con un 96% de votos favorables la decisión de ampliar capital para poder realizar el pago prometido en la opa hostil lanzada para adquirir la entidad catalana .
Aunque la aprobación de la junta se daba por hecha, el porcentaje alcanzado por el banco que preside Carlos Torres es incontestable. El 63% de los accionistas del BBVA son fondos y su voto afirmativo se daba por sentado; quedaba la incógnita del 37% de accionistas particulares.
A la espera de los trámites regulatorios que deben producirse en los próximos meses antes de que los accionistas del Sabadell puedan decir la suya, el BBVA ha hecho su parte con toda una demostración de fuerza. El resultado, además, tiene una lectura aún mejor para los intereses de la entidad azul: la firma de análisis financiero XTB afirmaba este mediodía que la opa saldrá adelante porque la mayor parte de los grandes inversores de ambas entidades son los mismos . Los grandes fondos controlan cerca del 40% del banco catalán y con ese apoyo el BBVA sólo necesitaría obtener entre un 10 y un 15% del apoyo de los particulares para llegar al 50,1% que validaría la opa.
Esta lectura, sin embargo, era negada por otras fuentes financieras, que recuerdan que a tantos meses vista es imposible que los fondos hayan tomado una decisión sobre la opa. Estas voces recuerdan que la cotización con la que lleguen BBVA y Sabadell en el momento decisivo será clave y, por tanto, la decisión no puede tomarse con tantos meses de antelación.
Torres saca pecho
La junta se ha resuelto en poco menos de dos horas y Torres ha sido su principal protagonista. Durante su intervención inicial, defendió las ventajas de la operación, que permitiría al BBVA ganar clientes y "diluir costes fijos", lo que le permitiría poner "precios más competitivos".
Una vez más, el ejecutivo madrileño ha reivindicado que BBVA y Sabadell tienen negocios "enormemente complementarios" y que con la operación la entidad con sede en Bilbao "redobla" su apuesta por las pymes. Torres, que se mostró convencido de que la operación saldrá adelante pese a la oposición rotunda del gobierno español, el catalán, el valenciano y la inmensa mayoría de patronales y sindicatos, reivindicó el carácter amistoso de este intento de compra. "Esta operación es una clara apuesta por España y por sus pymes", ha manifestado el banquero.
Durante su discurso inicial, el presidente del BBVA ha arrancado los aplausos del auditorio al recordar la política de dividendos de una entidad que cuenta ahora con 74 millones de clientes, 121.000 empleados y que tiene una rentabilidad sobre activos tangibles del 17%, muy por encima del 12,4% del conjunto del sector en Europa.
Críticas sindicales
Como viene siendo habitual en las juntas de todos los bancos, los sindicatos han tomado la palabra para mostrar su oposición a una fusión que tiene sentido económico por la reducción de puestos de trabajo que comportaría. De hecho, las últimas tres fusiones financieras ocurridas en España han supuesto la supresión conjunta de 13.000 puestos de trabajo, y los expertos calculan que en este caso la cifra de trabajadores afectados podría superar los 4.000. Los representantes de los trabajadores también han criticado la fuerte presión que reciben por cumplir con los objetivos comerciales.
Posteriormente, Torres les ha contestado que el banco tiene un "compromiso firme con la conservación del empleo de calidad".
Luis del Rivero elogia a Oliu
La sorpresa del acto la ha protagonizado Luis del Rivero, ex presidente de la constructora Sacyr. Como accionista del BBVA ha tomado la palabra para apoyar a la opa sobre el Sabadell pero sin la dirección actual del banco de origen vasco. Del Rivero recordó la imputación del BBVA, de su expresidente, Francisco González, y de varios directivos por el caso Villarejo y aseguró que la cúpula actual no es la adecuada. "La solución está en los opacos", ha dicho, en lo que era el prólogo de un encendido elogio de la figura de Josep Oliu, presidente del banco catalán.
Del Rivero ha recordado la formación académica de Oliu, con su paso por Minnesota, y su larga trayectoria como banquero, asegurando que sería una buena opción que se hiciera cargo de la entidad resultante si la opa y la fusión prosperan.
La otra nota negativa para el BBVA, en un día en el que ha reforzado su posición, han sido las palabras del ministro de Economía, Carlos Cuerpo, quien una vez más ha insistido en que el gobierno español no ve con buenos ojos esta operación.