La bolsa se cae: pánico u oportunidad?
La última semana ha sido muy mala en los mercados americanos, y también en los globales, aunque para nadie ha sido una sorpresa. 2025 es uno de los mejores años en bolsa desde la crisis de 2008, y es normal que en algún momento lleguen correcciones. A menudo se dice que las caídas son sanas porque permiten seguir subiendo con mayor solidez.
En estos casos, ¿cómo debemos actuar? Sobre todo, no debemos dejarnos llevar por las emociones. Las correcciones suelen ser oportunidades de compra y, por tanto, hay que evitar el pánico. Lo peor que se puede hacer es vender por miedo. Precisamente, existe un índice que mide las emociones de los inversores, que va del pánico a la euforia. En teoría, deberíamos comprar cuando hay pánico y vender cuando hay euforia, pero a menudo hacemos todo lo contrario, dejándonos llevar por los impulsos. A medio y largo plazo el índice funciona bien.
¿Y si sigue cayendo? Probablemente es lo que muchos piensa ahora mismo, y puede ocurrir. Es imposible saber cuándo un mercado dejará de caer y volverá a subir; si alguien dice que lo sabe, mejor no creerle. El tiempo es un factor clave. En ese mismo 2025, los meses de enero a marzo fueron claramente bajistas y, en cambio, desde entonces las ganancias han sido muy significativas. Noviembre será un mes de pérdidas, sí, pero mientras las correcciones sean controladas, lo más probable es que en unos meses los índices vuelvan a marcar máximos.
En última instancia, invertir es un ejercicio de racionalidad. Esto significa tomar decisiones basadas en datos, horizonte temporal y estrategia, y no en impulsos o titulares dramáticos. La racionalidad implica aceptar que habrá momentos incómodos, pero también confiar en el proceso y mantener la disciplina. Si las caídas de las últimas semanas te hacen perder el sueño, seguramente deberías invertir en otro producto que no sea la bolsa.
