Desconectar durante las vacaciones: manual de instrucciones
Hacer deporte, alejarse de las pantallas y leer son buenas maneras de conseguirlo
BarcelonaLas vacaciones son el momento más esperado del año para los que desean pasar más tiempo con la familia, disfrutar del buen tiempo, leer una novela o viajar a la otra punta del mundo. Para muchos, el mes de julio se convierte en una cuenta atrás para llegar a sus semanas de descanso y romper, de una vez por todas, con la rutina que hace meses que siguen. Además, según explica la experta en marca personal y consejera delegada de INNERO, Arancha Ruiz, inconscientemente, a medida que se acerca el periodo, la gente empieza a notar que las necesita.
Otro factor clave para entender las ganas de vacaciones que muchos sufren es la “tensión” que se vive en muchas compañías durante el mes de julio. Ruiz explica que, por el hecho de que muchas empresas cierran en este mes los resultados del primer semestre del año, “la gente suele correr para acabar de hacer lo que tiene pendiente”. Además, la gente que tiene hijos también suele llegar a agosto más cansada. “Una vez se acaba la escuela, los niños rompen toda su rutina y los padres se tienen que adaptar como puedan. Es por eso que llegan a su periodo libre con más ganas”, explica. Aun así, desconectar del trabajo durante los días libres no es tan fácil como parece y hay varios consejos que nos permiten alejarnos del todo.
Pantallas fuera
Ruiz explica que, para poder huir de la rutina, es muy importante dejar el móvil y el ordenador bien lejos. “Antes de marcharse de la oficina o puesto de trabajo, es imprescindible automatizar un correo diciendo que estás de vacaciones”, relata. La consejera delegada de INNERO insiste en que, por mucho que veas mensajes entrar en la bandeja de entrada, tienes que “mantenerte firme en no prestarles atención” y, si es posible, desinstalar las aplicaciones con las que cada uno se relacione laboralmente. Según dice, cuando consigues dejar estar este vínculo es cuando buscas actividades alternativas que sí que permiten romper la rutina y te permiten desconectar por completo.
La experta indica que ganar esta distancia con el trabajo es beneficioso, también, a la hora de volver al puesto de trabajo. “Es muy positivo poder alejarse un tiempo de la productividad para después rendir mejor”, asegura. Además, Ruiz indica que “se tiene que saber qué haces, pero también el porqué”, y cree que, a veces, “perdemos la perspectiva de por qué hacemos lo que hacemos”. Alejarse de las pantallas es una manera de explorar nuevas cosas y poder conectar con gente o lugares que hace tiempo que no vemos, y es por eso que “también es muy positivo para la innovación”.
La hora del libro
Durante el periodo de vacaciones, mucha gente aprovecha para quitar el polvo a los libros de Sant Jordi que todavía no han podido leer o para comprarse el nuevo bestseller y zampárselo mientras toma el sol en la playa. La lectura es la mejor manera para desconectar del día a día y transportarse a un lugar imaginario. Por eso, Ruiz explica que ella siempre recomienda leer cada día un rato para “poder evadirse de las preocupaciones y conectar con entornos diferentes”.
Deporte para descansar
Otra manera de desconectar del día a día es hacer ejercicio: hacer excursiones por la naturaleza, volver a engrasar la cadena de la bicicleta o ir a correr de buena mañana son una buena manera de centrarnos en la actividad que estamos haciendo y dejar de pensar en el trabajo. Según la experta, “el descanso también trata de cambiar de actividades”. Hacer deporte es una manera saludable de rodearnos del medio que nos rodea y salir de casa.
Rebajar la productividad
Por último, Ruiz explica que es muy importante rebajar la tensión. “Las vacaciones son el momento de hacer lo que más nos guste”, dice. Destaca la necesidad de reducir la productividad y asegura que una buena manera de hacerlo es “consumiendo humor”. Ruiz asegura que lo que nos tiene que distinguir es “la imaginación y tener una visión particular de lo que nos rodea” y que esto se consigue nutriéndonos de experiencias durante los periodos que tenemos para nosotros. “Las vacaciones no dejan de ser un periodo de aprendizaje personal en el que conseguimos generar nuevas ideas que nos servirán en el futuro”.