Mediamarkt y Fnac, a punto de caer en manos del gigante chino JD.com
La empresa asiática se convertirá en el primer accionista de la compañía alemana y en el segundo de la francesa
ParísMediamarkt es una de las empresas más emblemáticas de Alemania, como la Fnac lo es de Francia. "Es soberanía cultural. Es el primer vendedor de libros de Francia, es una institución cultural francesa", aseguraba un ex ministro de Economía francés para referirse a la Fnac. En el país vecino, Mediamarkt, que se dedica a la venta de productos electrónicos y electrodomésticos, ha sido siempre el ejemplo de una empresa que nace de la nada y acaba siendo una multinacional. El orgullo de un país considerado como la locomotora económica de Europa y un referente industrial.
Si hasta ahora el accionariado de ambas empresas estaba mayoritariamente de su país o estaba en manos de accionistas europeos, las cosas están a punto de cambiar. La empresa china Jingdong, conocida como JD.com, un gigante asiático de comercio online similar a la americana Amazon, busca expandirse fuera de China y ya ha dado sus primeros pasos. JD.com prevé apoderarse del 71% del capital de la alemana Ceconomy, la compañía madre de Mediamarkt y Saturn. De rebote, la empresa asiática entrará en el accionado de Fnac-Darty porque Ceconomy tiene desde 2017 el 22% del capital de la empresa francesa. Jingdong es la tercera empresa del sector en China, por detrás de Alibaba y de Pinduoduo, la compañía madre de Temu.
JD.com se convertirá en el primer accionista de Mediamarkt y en el segundo de la Fnac. De hecho, la primera parte de la operación ya se completó el 10 de noviembre y se espera que la segunda finalice esta semana. JD.com ha tomado el control de Ceconomy después de pagar 2.500 millones de euros, lo que supone una de las mayores inversiones de China en Europa en el comercio minorista. La compra ya ha recibido el visto bueno de la autoridad de competencia alemana y ahora está pendiente de recibir la luz verde del gobierno alemán, de la Comisión Europea y del gobierno francés.
Francia, en contra
En Alemania, la compra de Ceconomy y sus filiales por parte de una gran empresa asiática no ha generado mucha polémica y es poco probable que el gobierno vete la operación. En cambio, al gobierno francés no le ha hecho ninguna gracia que una empresa china se convierta en el segundo accionista de una empresa considerada un buque insignia del país, sobre todo ahora que otro gigante asiático, la empresa online de'ultra fast fashion Shein, ha desembarcado en Francia abriendo la primera tienda física permanente en el mundo. El ejecutivo francés ha abierto una batalla judicial contra Shein y lo más probable es que ahora haga lo posible por terminar la entrada de JD.com en el accionariado de Fnac-Darty.
Francia considera que la entrada como segundo accionista de la Fnac-Darty por parte de una empresa china pone en riesgo su soberanía cultural y, por ello, el gobierno quiere recurrir al control de las inversiones extranjeras (IEF), una herramienta de seguridad económica que Francia puede utilizar para frenar inversiones de empresas. Algunas de estas inversiones, las que afectan a la defensa nacional o las que son "susceptibles de poner en juego el orden público y las actividades esenciales para garantizar los intereses del país", necesitan una autorización expresa del gobierno.
Según el semanario económico La Tribune, el entorno del ministro de Economía francés, Roland Lescure, confirmó que JD.com ya ha presentado el dossier IEF, a petición de París, y que el ministerio lo estudiará "con gran rigor". La semana pasada, el director general de Fnac Darty, el español Enrique Martínez, se reunió con el ministro de las pymes y el comercio, Serge Papin, asegura el semanario. Según la cadena BFMTV, Martínez "no está contento" con la llegada de la empresa asiática.
"Seremos muy firmes y extremadamente sensibles a que los bienes de electrodomésticos fabricados en Francia sigan produciéndose en nuestro territorio", han asegurado fuentes del ministerio a la misma cadena. El gobierno podría obligar a JD.com a compromisos relacionados con el origen de los productos vendidos en la Fnac y en Darty.
Preocupación por los datos de los clientes
Además del origen de los productos, una de las preocupaciones francesas es la relativa a los datos de los clientes: una ley china de 2017 autoriza al gobierno asiático a pedir a sus empresas datos sensibles de sus filiales europeas. "La irrupción de JD.com no es sólo una cuestión de logística o de precios, sino una cuestión de perfilaje masivo y de influencia estratégica", explica La Tribune.
Fnac-Darty dispone de los datos de dos millones de clientes, incluidos sus hábitos culturales y de consumo. En España, Mediamarkt cuenta con 110 tiendas y 7.000 trabajadores, mientras que la Fnac dispone de una treintena de tiendas y unos 2.000 empleados.