Tu podcast favorito suena desde Sant Cugat

Es viernes en la tarde y se va de fin de semana. Antes de acomodarse al volante, toca decidir qué banda sonora va a sonar en la carretera. Hasta hace pocos años existían dos opciones: la radio, la FM de toda la vida, o música, sea en el formato que sea. Pero poco a poco se ha ido imponiendo una tercera vía: el podcast. Según un estudio de la Universidad de Navarra, este año el 50% de los internautas menores de 45 años han escuchado a alguno. Ya sean programas de divulgación, entretenimiento, debate o música, un podcast es un contenido sonoro creado exclusivamente para Internet. El éxito del formato es un hecho, y la mejor prueba de ello es la entrada de los grandes gigantes tecnológicos en el mercado, después de unos años en los que sólo Apple había apostado con iTunes. Ahora que Spotify y Google tienen servicio de podcast, es el momento de recordar que una empresa catalana lidera el sector de publicación y consumo de este formato en España y parte de Latinoamérica. Se llama iVoox, está en Sant Cugat del Vallès y su aplicación acumula siete millones de descargas entre App Store y Play Store.

Fue precisamente en un viaje en coche, del que surgió la idea. “Hacía muchos trayectos solo y pensé que estaría bien tener una programación a la carta, para así aprovechar el rato lo más posible”, explica Juan Ignacio Solera, madrileño de nacimiento y residente en Catalunya desde hace dieciocho años. Era el 2008 y poca gente tenía un smartphone, pero el reproductor MP3 era el gadget de moda. El razonamiento de Solera, que quería escuchar programas de biografías e historia, tenía lógica: "Si podíamos elegir qué canción queríamos escuchar en cada momento, ¿por qué no en una locución?", recuerda. Tenía la idea, pero el nacimiento de iVoox todavía quedaba lejos; faltaba que ese físico de formación la materializara. Esto fue posible por una casualidad de las que pasan una vez en la vida: “Lo conté al padre de un compañero de escuela de mis hijos y resultó que trabajaba en el grupo Intercom. Él me recomendó proponerlo ahí”. Antonio González Barros, presidente del grupo fundador de Infojobs y Softonic, se interesó por el propósito de Solera e incluyó a iVoox en su incubadora de proyectos en internet, con una financiación inicial de 200.000 euros.

La 'Star-up' va ir un paso más allá de lo que ofrecía el mercado. El líder del sector, iTunes, sólo permitía reproducir un programa, así que iVoox se hizo fuerte en su publicación. Cualquier persona que grabara un podcast, fuera en su casa o en un espacio profesional, podía alojarlo allí de forma gratuita. Este hecho provocó que la militancia del sector se volcara desde el primer momento: “Nunca necesitamos gastar un solo euro en marketing, con el boca a boca ya llegábamos a todo el mundo que quería publicar un podcast. Ahora ya existen otros servicios, pero durante años fuimos casi los únicos a nivel internacional al dar esta solución”, asegura el fundador de iVoox.

Del éxito del proyecto hablan las cifras: después de doce años la empresa ha crecido a ritmo sostenido pero sin detenerse y tiene un catálogo que supera el millón de podcasts en todo el mundo. De ese millón, 200.000 están alojados en iVoox. Esto son unos treinta millones de horas de radio -tiempo que equivaldría a tragar 4.000 años de programas para terminar el archivo-, y se han producido más de 1.000 millones de reproducciones. Pese a la espectacularidad de las cifras, iVoox ha rendido cuando el podcast se ha popularizado especialmente, lo que se ha acentuado en los últimos dos años: “Pasamos ocho años teniendo problemas de rentabilidad económica. Aún no hemos dado el gran salto. Lo haremos cuando el formato sea realmente maduro”, explica Juan Ignacio Solera. La empresa facturó 1,5 millones de euros en el 2019 manteniéndose dentro del grupo Intercom y contando con varios pequeños inversores, en su mayoría profesionales catalanes. "Este último año ya pasamos de la veintena de trabajadores, aunque los primeros siete años sólo éramos tres", recuerda.

Lo que también ha ido variando ha sido la monetización del servicio. Si bien desde sus inicios la fuente principal de ingresos fue la publicidad que sonaba antes de cada podcast, en los últimos años han activado servicios de suscripción, como iVoox Premium y iVoox Plus, y un sistema de micromecenazgo para cada podcast, que la empresa se queda un porcentaje.

El futuro es esperanzador e irá de la mano de un formato cuyo crecimiento parece no tener techo, sobre todo después de que el confinamiento dejara un crecimiento del 25% del consumo total sólo en el primer semestre del ' año. Parece que Juan Ignacio Solera va a seguir teniendo un buen puñado de programas de historia para amenizar sus viajes en coche.