Financias personales

La noche ya no es el mejor momento para poner la lavadora

El tope al gas cambia la curva de los precios de la electricidad

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Una persona pone una lavadora, en una imagen de archivo

BarcelonaCuando el 1 de junio de 2021 –hace poco más de un año– entró en vigor el nuevo recibo de la luz, todo el mundo se quedó con una máxima: por la noche la electricidad es más barata. Las organizaciones de consumidores aconsejaban poner en marcha por la noche los electrodomésticos de gran consumo, como la lavadora, la secadora y el lavavajillas, o planchar la ropa en horas nocturnas.

De hecho, la intención del gobierno español cuando puso este modelo en marcha era desviar el consumo de horas punta a horas con menos demanda, una forma de ser más eficientes en el consumo eléctrico y, sobre todo, no tener que aumentar la generación e invertir más allá de lo que hacía falta en las redes para poder hacer frente a las altas puntas de consumo.

Pero después llegaron la recuperación poscovid y, sobre todo, la guerra de Ucrania, que han elevado el precio de la electricidad a máximos históricos. España –junto con Portugal– arrancó en la Unión Europea la denominada excepción ibérica, que permite poner un tope en el precio del gas que se utiliza para generar electricidad en los ciclos combinados. A cambio, las empresas energéticas tienen que recibir una compensación.

Este sistema ha cambiado del todo la curva de los precios horarios de la electricidad en el mercado mayorista. La luz ya no es más barata por la noche: al contrario, la compensación por el gas hace que la noche y la madrugada acumulen las horas más caras. ¿Por qué? Joaquim Daura, vicepresidente del Clúster de la Energía Eficiente de Catalunya (CEEC), lo explica. "Por la noche no hay sol; por lo tanto, no se genera con fotovoltaica, y normalmente hace menos viento, cosa que hace caer la generación eólica", dice. El resultado es que tienen que entrar en funcionamiento los ciclos combinados de gas y, en consecuencia, sube la compensación en las centrales, que acaban pagando los usuarios.

En cambio, actualmente al mediodía y a primera hora de la tarde es cuando la electricidad es más barata. Esto responde al hecho que es la franja del día con más producción solar, cosa que rebaja la necesidad de gas. Y esto provoca un segundo efecto: la compensación por el tope del gas baja y se reparte entre más.

El cambio en el precio de la luz
Datos medios en €/MWh por horas de lunes a viernes la segunda semana de julio del 2021 i del 2022
Datos medios en €/MWh por horas el segundo fin de semana de julio del 2021 i del 2022

En efecto, por la noche no solo aumenta la compensación económica que tienen que recibir los ciclos combinados por el tope al precio del gas, sino que al bajar la demanda, la compensación se divide entre menos usuarios y sube su impacto, explica un experto del sector eléctrico.

Cuando el gobierno español planteó el nuevo modelo de factura que entró en vigor el 1 de junio del 2021, jugó con los peajes y cargos para hacer más grande el gap entre las horas más caras y las más baratas. Así, la factura establece tres niveles de peaje: el de las horas valle (más baratas), de las 24 h a las 8 h y todo el fin de semana; el de las horas planas (coste intermedio), de las 8 h a las 10 h, de las 14 h a las 18 h, y de las 22 h a las 24 h; y el de las horas punta (las más caras), de las 10 h a las 14 h y de las 18 h a las 22 h.

Menor peso de los peajes

El efecto que tienen estos diferentes peajes en el recibo, que incentivaban a hacer el gran consumo por la noche y los fines de semana, ha desaparecido ahora por dos factores: por un lado, la luz se ha encarecido tanto que el precio del peaje es proporcionalmente mucho menor. Por el otro, la compensación por el uso del gas se come el descuento que podían aportar los peajes más baratos.

¿Este cambio que se ha producido en el precio de la electricidad afecta a todo el mundo? No exactamente. Afecta básicamente a los clientes que están en el mercado regulado (el denominado PVPC), puesto que tienen el precio vinculado al mercado mayorista horario; pero también afecta a una parte de los clientes del mercado libre, los que tienen un recibo indexado al mercado mayorista. En cambio, no afecta a los clientes del mercado libre que tienen pactados precios o cuotas fijas, explica un experto en facturación.

El mercado ahora "es una montaña rusa en la cual, además, te cambian de carril", detalla un experto del sector, que indica que el ajuste por el tope del gas encarece la luz por la noche, sobre todo los fines de semana. Y esto no solo afecta a los usuarios domésticos. También algunas empresas lo sufren, por ejemplo las del acero, que tienen preparada su producción por la noche porque es cuando tradicionalmente la electricidad era más barata. Estas empresas electrointensivas, si no tenían contratos pactados a plazos y compraban en el mercado mayorista la electricidad, ahora producen cuando la energía es más cara.

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