Ferrovial despega de Heathrow para aterrizar en el JFK de Nueva York

LondresFerrovial se va de Londres para instalarse en Nueva York. El aeropuerto de Heathrow, en el oeste de Londres, está a punto de partir una enorme sacudida en su accionariado, hasta ahora liderado por la constructora y gestora de infraestructuras española, que espera destinar el líquido que obtenga con la operación a reforzar su posición en otras concesiones, entre las que destaca la Nueva Terminal 1 (NTO) del aeropuerto John Fitzgerald Kennedy.

Cuando en 2006 Ferrovial aterrizó en Londres lo hizo comprando una participación del 55,87% en la entonces propietaria, British Aeropuerto Authority (BAA). Entonces, a través del consorcio FGP Topco Limited, el grupo español empezó una aventura que en 18 años le ha llevado a controlar, inicialmente, otros seis aeropuertos del Reino Unido: Stansted, Gatwick, Aberdeen, Southampton, Glasgow y Edimburgo. Problemas con la regulación de la competencia le obligaron a desprenderse en distintas etapas de Gatwick, Stansted y Edimburgo.

En paralelo, en 2012, la empresa que lidera Rafael del Pino Calvo-Sotelo, hijo del fundador de Ferrovial, vendió el 10,6% de las acciones de Heathrow en Qatar Holding Authority, el fondo soberano de el emirato. Finalmente, redujo su participación hasta el 25% en 2013. Ahora, y pendientes los últimos flecos “de las aprobaciones reguladoras aplicables”, de acuerdo con un comunicado de Ferrovial de la semana pasada, si finalmente se confirma la operación grupo español de infraestructuras se quedará, sólo, con el 5,25% de las acciones. Por el 19,75% de los títulos que vende, Ferrovial se embolsará unos 2.025 millones de euros. socio australiano Macquarie, de desprenderse del 100% de la filial AGS, en la que se agrupan los aeropuertos de Aberdeen, Glasgow y Southampton

El primer aviso de que Ferrovial abandonaría Heathrow llegó en el 2020, de la mano de Ignacio Madridejos. El consejero delegado advirtió entonces de que podrían deshacerse de ellos si no podían "obtener una rentabilidad adecuada para los inversores". Se discutía en ese momento la subida de las tarifas aéreas por pasajero y, una vez más, la eternamente postergada ampliación, con la construcción de una tercera pista que sigue sujeta a desafíos legales. Heathrow es el aeropuerto de otras dos pistas saturado del mundo, con un límite de 1.315 movimientos al día. La demanda es tal que en 2019 se utilizó el 99,15% de esta capacidad. Y este año se prevé que se superen los niveles de operaciones prepandémicos.

Problemas con las tasas

En relación a las tasas, el aeropuerto quería recaudar más por cada pasajero. Pero la Civil Aviation Authority (CAA) se ha opuesto a ello. Y, de hecho, ha terminado fijando el límite por viajero para 2026 en 31,27 euros desde los actuales 35,87. Inútilmente, Heathrow presionó para cargar más de 47 euros.

El debate sobre las tasas coincidió con el estallido de la pandemia y la casi paralización total de las operaciones en el 2020 y una reducción muy importante en el 2021. La covid generó unas pérdidas de 812 millones de euros 2022. Unas cifras que, sin embargo, supusieron una mejora respecto a las del 2021, cuando los números rojos ascendieron a 1.544 millones.

En 2023 Heathrow ya logró un beneficio antes de impuestos de 45 millones de euros, si bien el balance seguía lastrado por el pago de 1.780 millones de euros en intereses de una deuda que alcanza ahora 19.960 millones de euros . Sin embargo, el reparto de beneficios sigue suspendido, si bien la previsión de la Civil Aviation Authority (CAA) del Reino Unido es que entre 2024 y 2027 podría repartir no menos de 2.000 millones de euros.

En noviembre del 2023, Ferrovial informó del acuerdo alcanzado con los franceses de Ardian, antiguos copropietarios de Luton, y The Public Investment Fund (PIF), el fondo soberano de Arabia Saudí, para venderse sus acciones. PIF, dicho sea de paso, tiene otros intereses en Reino Unido, que incluyen la propiedad del Newcastle United FC y también una participación en Aston Martin, el fabricante de automóviles. El fondo soberano saudí está controlado, en última instancia, por el instigador intelectual de la muerte del periodista del Washington Post Jamal Khashoggi, el príncipe heredero Mohamed bin Salman.

Pero el plan de Ferrovial tropezó con las primeras dificultades cuando otros tres accionistas del aeropuerto –propietarios del 35%– quisieron ejercer los llamados derechos de adjudicación, que les posibilitaba vender sus acciones a consecuencia del cambio de propiedad y al mismo precio. Son el fondo de pensiones canadiense Caisse de Dépôt et Placement du Québec (CDPQ), el fondo soberano de Singapur GIC y el Sistema de Pensiones de las Universidades del Reino Unido (USS). El acuerdo original valoraba a Heathrow en 11.287 millones de euros. La liquidación revisada a la baja tuvo un precio de 9.860 millones de euros, un descuento del 13%.

En virtud del nuevo acuerdo, Ardian ha adquirido el 22,6% de Heathrow por poco más de 2.500 millones de euros y el fondo saudí el 15%. Qatar Holding Authority, con una participación del 20%, sigue siendo el segundo accionista del aeropuerto, lo que podría plantear una tensión futura entre saudíes y qataríes. Otros accionistas siguen siendo el fondo China Investment Corporation y el fondo soberano de Singapur GIC, que finalmente mantiene su presencia en Londres.

La inauguración de la Terminal 5 (2008) y la remodelación de la 2 (2014) han sido los hitos más destacados de Ferrovial en sus años de control de Heathrow. Paradójicamente, en la ceremonia de apertura de ese 2008, con la presencia de Isabel II, el hombre fuerte de Ferrovial, Rafael del Pino Calvo-Sotelo, fue marginado a un muy discreto segundo plano. Ahora hace las maletas hacia Nueva York.