La eliminación de los trenes AVLO entre Barcelona y Madrid dispara los precios de los billetes en un 40%

BarcelonaEn un solo mes, los usuarios de alta velocidad entre Barcelona y Madrid lo tienen claro: la eliminación de los trenes AVLO de Renfe ha disparado los precios. Lo han visto quienes viajan de una ciudad a otra, pero también quienes aprovechaban la opción de bajo coste del operador ferroviario para llegar a la capital catalana desde Tarragona, a un mejor precio en comparación con los AVE.

Trainline, plataforma de reserva de viajes de tren, cifra el encarecimiento en un 40% para este trayecto entre Barcelona y Madrid, si se comparan los datos de este septiembre con el mismo mes del año anterior. Renfe decidió abandonar el low cost en su principal corredor de alta velocidad, donde tenía una cuota de mercado del 15%, después de todos los problemas que han dado los trenes Talgo que operaban este servicio, diciendo que esto no afectaría a los precios de los billetes que pagaban los usuarios. En el resto de corredores donde operan los AVLO, quienes conectan Madrid con Andalucía y Galicia, el operador ferroviario ha mantenido el servicio de bajo coste, pese a estar operados con el mismo modelo de Talgo.

El aumento del precio de la alta velocidad entre Barcelona y Madrid en septiembre se ha distribuido entre todos los operadores, no sólo Renfe, situando el precio medio en los 80 euros y escalando hasta los 150 euros en fin de semana. Antes de eliminar los trenes AVLO, en el segundo trimestre de este año, el precio medio del trayecto fue de 63 euros, que era ya un 15% más caro en comparación con el año anterior, según datos de la Comisión Nacional de la Competencia (CNMC). En el caso de los AVLO, se situó en los 51,95 euros, mientras que los AVE siguieron siendo los más caros, con 73,91 euros. Pese al aumento de precios, los pasajeros registraron un nuevo récord, hasta los 3,9 millones en tan sólo un trimestre, con la previsión de superar los 15 millones anuales, frente a los 8 millones de antes de la liberalización.

Desde Trainline esperan que este repunte sea puntual y acabe moderándose, a la espera de que Renfe cubra el vacío que ha dejado o lo hagan los otros operadores que hacen este trayecto, Ouigo e Iryo. "La tendencia es más liberalización", defiende el responsable general de Trainline en Europa, Pedro García, "pero todos los operadores registran pérdidas y la presión por aumentar precios es evidente". Pese a esta reciente subida, la liberalización del sector ferroviario ha hecho que los precios de los billetes de tren entre Barcelona y Madrid hayan caído un 35%, desde 2019, antes de la pandemia y de la entrada de los competidores, además de disparar el número de usuarios. Una tendencia que se repite en otros mercados como Francia, con una disminución del 43% en el precio medio de la ruta París-Lyon, o Italia, con una reducción del 40% en la de Milán-Roma.

Barcelona, ​​puerta de entrada al sur de Europa

La capital catalana no solo concentra muchas conexiones hacia Madrid, sino hacia otras ciudades como Sevilla y Valencia, donde la demanda ha crecido un 113% y un 90%, respectivamente, en los últimos meses, según datos de Trainline. La influencia de Barcelona se extiende más allá de España, con mayor tráfico hacia Lyon (+118%), una ruta que se ofrece desde Sants por Renfe y el operador francés SNCF. También crece hacia París (+38%), un destino que sólo cubre SNCF tras las trabas que ha puesto para que Renfe pudiera operarlo.

Pese a los datos, Trainline todavía ve la conexión transfronteriza como una asignatura pendiente, con España como uno de los estados europeos donde menos se piensa en esta opción para viajar entre países vecinos y se tiende más a tomar un avión. Mientras un 60% de los franceses y un 67% de los italianos conocen las rutas internacionales en tren que salen de su país, en España la proporción cae hasta el 47%.