Apple estudia trasladar de China a la India el montaje de los iPhones para EE.UU.

El gigante tecnológico tiene previsto cambiar la producción el próximo año en respuesta a la guerra comercial de Trump

Las ventas de Apple crecieron menos de lo esperado en el caso de los iPhone, su producto estrella.
ARA
25/04/2025
3 min

BarcelonaApple está estudiando trasladar el montaje de todos los iPhones que vende a Estados Unidos de China a la India de cara al próximo año, según ha avanzado este viernes el Financial Times. Esta decisión es una consecuencia de la guerra comercial iniciada por el presidente Donald Trump, que ha obligado al gigante tecnológico a replantearse su producción. Así pues, la compañía cambiará su cadena de suministro de tal forma que los más de 60 millones de teléfonos móviles que vende cada año en EEUU salgan de India a finales de 2026. Según explica el rotativo, el objetivo significaría duplicar la producción de iPhones en India, después de casi dos décadas en que Apple X se ha convertido en un coloso tecnológico de 3 billones de dólares. China, donde Apple fabrica la mayoría de los teléfonos a través de terceros como Foxconn, sufrirá los aranceles más altos de Trump, que pueden llegar hasta el 245% en algunos productos. De todas formas, el republicano también ha dejado entrever que estaría dispuesto a negociar con Pekín. El anuncio de los nuevos gravámenes hizo perder 700.000 millones de dólares de valor de mercado en Apple. Por eso ahora la empresa se ha apresurado a exportar los iPhones fabricados a la India hacia EEUU para evitar los aranceles a China.

Este movimiento llega después de que en los últimos años Apple ya haya aumentado su capacidad de producción en India, a través de contratos con empresas como Tata Electronics y Foxconn, aunque hoy en día todavía fabrica la mayoría de los teléfonos en China, explica el Financial Times. El ensamblaje del iPhone es el último paso del proceso de producción, cuando se juntan los cientos de componentes que conforman el dispositivo y por los que Apple todavía depende en gran medida de proveedores chinos.

Esquivar los aranceles

En un principio Trump anunció aranceles recíprocos de más del 100% sobre las importaciones procedentes de China, pero después ofreció un indulto temporal para los teléfonos móviles y los ordenadores. Estos dispositivos están aún sujetos a otra tasa del 20% que se aplica a todas las importaciones procedentes de China. Por otra parte, el diario económico recuerda que la India recibió un llamado arancel recíproco del 26%, aunque este gravamen también está en pausa mientras el gobierno indio presiona por un acuerdo comercial bilateral con EEUU. En una visita a India esta semana, el vicepresidente estadounidense, JD Vance, dijo que ambos países estaban haciendo "muy buenos progresos".

En 2024, según datos del International Data Corporation, Estados Unidos concentraba cerca del 28% de los 232,1 millones de iPhones que Apple envió por todo el mundo. Para poder atender a toda la demanda norteamericana desde India, sin embargo, Apple tendrá que ampliar aún más su capacidad de producción en el país. Mientras intentaba aumentar la fabricación en este mercado, el pasado año el gigante tecnológico ya empezó a importar conjuntos de componentes premontados desde China a través de Foxconn y Tata.

"Creemos que éste será un movimiento importante para que Apple pueda mantener su crecimiento y el impulso", dice Daniel Newman, director ejecutivo de la empresa de investigación Futurum Group, en Financial Times. "Estamos viendo en tiempo real cómo una empresa con estos recursos se está moviendo a una velocidad relativamente ligera para abordar el riesgo arancelario", añade.

Apple presentará los resultados trimestrales la próxima semana y sus inversores están alerta para entender cuál ha sido el impacto de los planes arancelarios de Trump en las cuentas. Hasta ahora la empresa no ha ofrecido ningún dato orientativo sobre sus ganancias y se ha abstenido de hacer comentarios sobre los aranceles. El director ejecutivo, Tim Cook, ha estado en contacto regular con el presidente estadounidense y su administración desde que asistió a su ceremonia de investidura en enero.

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