MODA

Las zapatillas ‘flow cost’ de Lidl que se revenden por 856 € en las redes

La cadena de supermercados agota su línea de moda corporativa y consolida la implantación en el Estado

Paula Solanas Alfaro
3 min
Les vambes ‘flow cost’ de Lidl que es revenen per 856 € a les xarxes

Si hay algún apartado de la moda que en las últimas décadas haya cogido dimensiones casi de culto religioso es el de los zapatos deportivos. El negocio de las zapatillas ha consolidado un regimiento de fans que son capaces de esperar horas en el exterior de una tienda para el lanzamiento de una edición limitada. Las colas se han vuelto habituales para marcas como Nike, Adidas o Yeezy (del rapero Kanye West), pero esta fiebre ha dejado una imagen todavía más insólita. La cadena de supermercados alemana Lidl ha estrenado este año sus propias zapatillas, que han volado de las estanterías y se han convertido por sorpresa en un fenómeno viral.

La multinacional ya vendía artículos de moda en sus establecimientos a través de promociones puntuales, pero esta vez lo ha hecho con una línea que coge directamente su imagen corporativa. Las exitosas zapatillas deportivas combinan los colores -azul, amarillo y rojo- y el logo de la cadena, un patrón que se repite en camisetas, calcetines, gorras y chanclas. La colección de Lidl se ha bautizado con el concepto flow cost y los precios no pasan de los 19,99 euros de las zapatillas .

Sea como fuere, el fenómeno hizo enloquecer las redes -antes de llegar a España la compañía las lanzó en Alemania, Finlandia y Francia-, donde se han convertido en carne de coleccionista. Después de que las 2.000 unidades de la página web se agotaran en menos de tres horas, en la reventa las zapatillas de la cadena de supermercados se han llegado a ofrecer por 856 euros, más de 40 veces el precio original, en plataformas como eBay o Wallapop. Una vez creada la expectativa, Lidl ha anunciado que las zapatillas volverán, esta vez en las estanterías el próximo mes, pero mientras tanto el mercado paralelo mantendrá los precios desorbitados.

Precisamente, la colección nació casi por casualidad después de una broma en las redes sociales. El Día de los Inocentes -que en muchos países se celebra el 4 de abril- Lidl publicó que estaba a punto de sacar al mercado su propia colección de ropa. Después de aclarar que se trataba de una inocentada, los seguidores de la empresa insistieron en la idea hasta que, finalmente, la colección se ha convertido en un éxito de ventas.

No es la primera vez que un producto de Lidl causa este efecto. El caso más reciente es el del robot de cocina Monsieur Cuisine que lanzó la firma alemana. En junio la compañía volvió a vender esta alternativa a la Thermomix, que tiene un precio mucho más asequible: el robot de Lidl cuesta 359 euros, por los 1.259 de su competidor. Como con la línea de moda corporativa, el gadget de cocina se puso a la venta primero a través de la plataforma online del supermercado y después llegó a las tiendas físicas. En los establecimientos de todo Europa, Monsieur Cuisine dejó imágenes de colas de clientes para conseguir una unidad. Tras la gama de electrodomésticos del gigante de la distribución -Lidl también vende robots aspiradoras, cafeteras y panificadoras- se encuentra la marca blanca Silvercrest. Con todo, todavía es un misterio el nombre de los fabricantes de los dispositivos, que siempre han mantenido una política de precios muy agresiva.

Lidl abrió su primera tienda en España en 1994, concretamente en Lleida. Desde entonces, sin embargo, el posicionamiento de la cadena alemana ha evolucionado. De ser un supermercado hard discount todavía con muchos productos procedentes del país germánico, la empresa ha pasado a adaptarse a los gustos locales y ha incorporado más frescos -mucho más importantes en la cesta de los españoles- y categorías gourmet. En esta estrategia, la compañía también ha abandonado las grandes superficies de la periferia y los polígonos para acercarse al centro de las ciudades.

Los catálogos de Lidl tienen seguidores fieles que buscan semanalmente ofertas de productos como por ejemplo juguetes de madera y utensilios de cocina. Esto también se ha visto reflejado en la cuota de mercado del grupo. A pesar de competir contra gigantes estatales como Mercadona, ha consolidado un 5,6% del pastel de la distribución y hasta ahora este año ha avanzado un 0,3%, mientras que Día y Carrefour retroceden en la carrera para llenar la nevera de los consumidores.

stats