Cuerpo y Mente

¿Por qué la luz solar nos hace sentirnos más felices?

Descubrimos cómo el verano nos ayuda a aumentar la producción de la llamada 'molécula de la felicidad'

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Serotonina

Barcelona¿Sabías que uno de los suplementos más importantes que puedes tomar para sentirte mejor es totalmente gratis? ¿Y no sólo eso, sino que en verano es cuando es más fácil conseguirlo y notar sus beneficios? Esta vitamina milagrosa que puede elevarnos el estado de ánimo y producirnos más satisfacción es la luz del sol.

En el libro Las seis hormonas que van a revolucionar tu vida (Planeta, 2024), el autor David JP Phillips explica cómo la luz solar contribuye a aumentar nuestra serotonina, un neurotransmisor muy importante para nuestro bienestar físico y mental. Muchos estudios aseguran que, en los países nórdicos, el estado de ánimo de muchas personas se desploma en los meses de invierno. "Y no es porque se rían menos, ni socialicen menos ni hagan menos ejercicio o coman peor, sino porque no les da el sol suficiente", explica Phillips.

El sol afecta a nuestra dosis diaria de serotonina. "Eso significa que los días que no salimos para que nos dé el sol estamos decidiendo no aumentar nuestros niveles de serotonina", continúa. Toda una lástima, dado que la serotonina tiene un efecto similar a los ISRS (inhibidores selectivos de la recaudación de serotonina), que es una familia de antidepresivos muy empleados en el mundo occidental.

Por ello, el verano se presenta como un momento ideal para disfrutar de más horas de luz y aumentar su producción. "No es casualidad que la serotonina sea una de las llamadas moléculas de la felicidad", explica José Ángel Morales, doctor en neurobiología e investigador del departamento de biología celular de la UCM. Y, mientras que buena producción de serotonina mejora el estado de ánimo, el aprendizaje, la memoria, la regulación de la temperatura corporal, el sueño, el comportamiento sexual y el apetito; una baja producción se asocia con la depresión, la ansiedad, los problemas para dormir, los trastornos obsesivos y otras fobias.

Por si fuera poco, la luz solar también aporta otros beneficios, como la producción de vitamina D, conocida por mejorar la salud neuronal y prevenir las enfermedades neurodegenerativas. "Y, como al final todo está relacionado, la vitamina D generada en la piel por la acción de la luz solar también promueve la formación de serotonina", continúa Morales, que matiza cómo, para que la piel produzca vitamina D, es necesario tomar el sol directamente, es decir, si estamos en casa con la ventana cerrada, la luz no estimulará su producción.

Eso sí, siempre es necesario vigilar de no excederse con el sol y tener un buen cuidado de la piel con el uso de fotoprotectores. "Aunque el uso de cremas solares disminuya la producción de vitamina D, tomar el sol sin protección promueve la aparición de cáncer de piel", advierte. Por tanto, aconseja que, para estimular la producción de vitamina D, tan sólo se necesitan 15 minutos de sol al día.

Beneficios del mar

Si a toda esta ecuación le sumamos una buena sesión de playa o piscina, conseguimos un combinado perfecto, según Morales: "La natación mejora nuestra salud mental y contribuye a luchar contra el estrés oxidativo y los radicales libres, lo que estimula el nuestro sistema inmunitario y mejora nuestra capacidad cognitiva y la memoria". No hace falta ni nadar para obtener los beneficios del mar: pasar tiempo cerca del océano nos puede ayudar a relajarnos ya reducir los niveles de estrés y ansiedad. "El sonido de las olas, la brisa marina y el color del mar tienen un efecto relajante que disminuye los niveles de cortisol y aumenta la secreción de serotonina y endorfinas, que producen sensación de felicidad y tranquilidad", continúa el neurobiólogo .

En definitiva, es normal que a nuestro cerebro le guste el verano. Ahora bien, ¿cómo podríamos gozar de un buen nivel de serotonina durante todo el año? En el libro Las seis hormonas que van a revolucionar tu vida, Phillips recomienda documentar la cantidad de tiempo que nos exponemos todos los días a la luz solar durante un año y anotar el estado de ánimo del uno al diez. "Si lo haces es más probable que identifiques una tendencia y te motivará a considerar la exposición a la luz solar como una «comida mental» que tienes que hacer todos los días y que es tan importante como el desayuno, el almuerzo o la cena ", asegura el autor.

Otros consejos que da Phillips para aumentar la serotonina son realizar ejercicio, una dieta saludable, dormir bien y practicar la meditación. "Evita el estrés crónico, construye una buena autoestima y practica la satisfacción, en vez de realizar multitareas y perseguir estímulos constantemente", concluye.

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