Aumentan a 131 los fallecidos en Chile por los incendios que asolan la región de Valparaíso
"Es la mayor tragedia que hemos vivido como país desde el terremoto del 2010", admite el presidente
BarcelonaLa cifra de fallecidos en Chile por los devastadores incendios que desde el viernes alcanzan la región de Valparaíso, unos cien kilómetros al este de la capital, ha aumentado hasta los 131. Y lo peor es que aún puede aumentar más, según ha reconocido el presidente chileno, Gabriel Boric. "Es la mayor tragedia que hemos vivido como país desde el terremoto del 27 de febrero de 2010", ha afirmado, en referencia al seísmo que causó 525 muertos y miles de heridos en el sur de Chile hace más de una década. Se ha decretado el duelo nacional durante dos días a partir de este lunes.
Al menos siete incendios permanecen activos en la zona, según la Corporación Nacional Forestal (CONAF). El de mayor magnitud es el de la Reserva Lago Peñuelas/Las Tablas, junto a la principal autopista de la región: ya ha quemado cerca de 9.300 hectáreas. También preocupa especialmente el fuego en Lo Moscoso, por su virulencia y por la proximidad a zonas densamente pobladas. El viernes se declararon decenas de incendios en Chile de forma simultánea, coincidiendo con una de las oleadas de calor más intensas que afectan al país en los últimos años. Las temperaturas alcanzaron casi los 38 grados en la zona central.
El presidente Boric se ha desplazado este domingo a Quilpué, una localidad muy afectada por las llamas. "La prioridad más urgente es recuperar los cuerpos de las personas fallecidas", ha destacado. La alcaldesa de Viña del Mar, otra de las ciudades afectadas, ha afirmado que existen 372 personas desaparecidas. Esto no quiere decir que todas hayan perdido la vida, pero sí da una idea de la magnitud de la tragedia. Se calcula que entre 3.000 y 6.000 viviendas han quedado destruidas por los incendios.
Confusión y baile de cifras
Ante el baile de cifras sobre el número de víctimas y las declaraciones a veces contradictorias de las autoridades locales y regionales, el presidente ha anunciado que, a partir de ahora, el único organismo oficial que realizará actualizaciones sobre el número de muertes es el Servicio Médico Legal. Así espera detener la confusión.
Boric declaró el sábado el estado de excepción por catástrofe. Por su parte, el Comité de Gestión de Desastres instauró un toque de queda en las localidades de Limache, Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar con el objetivo de agilizar la llegada de los servicios de emergencia y facilitar el evacuación. Boric ha defendido este domingo "mantener el toque de queda todo lo que sea necesario sin ningún tipo de complejo". Asimismo, el ministerio de Salud ha decretado la alerta sanitaria en la zona.
Por la simultaneidad de los fuegos y el lugar donde empezaron, las autoridades creen que algunos podrían ser intencionados. "Se hace difícil pensar que puedan existir personas tan miserables, capaces de generar tanta muerte y dolor, pero si existen, las buscaremos, las encontraremos y tendrán que hacer frente a la repulsa, no sólo de la sociedad entera, sino también de todo lo peso del derecho y la ley", ha advertido el presidente.
"Chile se enfrenta de nuevo a devastadores incendios con numerosas víctimas mortales que nos recuerdan los estragos de la sequía y el clima. Traslado mi apoyo y solidaridad al gobierno y en el pueblo chileno, la UE está lista para colaborar y proporcionar ayuda en estos momentos difíciles", ha escrito en la red social X este domingo el alto representante de la Unión Europea para los Asuntos Exteriores, Josep Borrell. Pero la ayuda de la Unión Europea no se puede activar hasta que Chile la solicite formalmente a Bruselas y, de momento, no lo ha hecho.