Una comunista y un ultraderechista se disputarán la presidencia de Chile
Jeannette Jara era ministra de Trabajo del gobierno Boric y Antonio Kast defiende la consigna "Make Chile great again"
Buenos AiresLa progresista Jeannette Jara y el ultraderechista José Antonio Kast se disputarán la presidencia de Chile el 14 de diciembre en segunda vuelta. Es el resultado de las elecciones de este domingo, en las que se ha impuesto la candidata comunista, con un 26,8%, por debajo de lo previsto en las encuestas. Kast ha obtenido un 23,9%, un resultado que le deja como favorito como aglutinador del voto conservador. La sorpresa de la jornada ha sido un Franco Parisi, candidato outsider, que hace campaña contra los partidos tradicionales y el establishment y promete "bala o prisión" para los delincuentes, y que rozó el 20%. La gran derrotada fue la derecha tradicional, encabezada por Evelyn Matthei, que no superó el 12,4%. La jornada electoral fue tranquila y con una altísima participación (86,5%, cifra atribuida a la recuperación de la obligatoriedad del voto). El giro a la derecha se confirma.
"Quiero enviar un abrazo fraterno a todos los que han votado por mí y también a los que no lo han hecho", ha dicho Jeannette Jara en su discurso de agradecimiento. "La democracia en nuestro país debe cuidarse y valorarse, nos costó demasiado recuperarla para que hoy se ponga en riesgo", ha dicho, aludiendo a la relativización de la dictadura de Augusto Pinochet que hacen Kast y los demás representantes de la derecha. "Casi la mitad de los chilenos y chilenas no han votado ni por mí ni por Kast, y desde mañana saldremos a hablarles ya escucharles atentamente", ha destacado Jara. La candidata, de afiliación comunista y la única opción que aglutinaba el voto de la izquierda y el centroizquierda, ha sido ministra de Trabajo con el presidente Gabriel Boric, y propone un programa de izquierda progresista, con un enfoque social en lugar de punitivo hacia la seguridad y la delincuencia, hoy en día la principal preocupación de los chilenos ante el aumento del crimen organizado en el país.
Por su parte, José Antonio Kast hizo un llamamiento a la unidad de la derecha para vencer a Jara en la segunda vuelta: "En la vida hay diferencias, incluso dentro de un mismo sector, pero estas diferencias no tienen comparación con lo que tenemos por delante, y lo que debemos evitar es la continuidad de un muy mal gobierno", dijo, y lo añadió que el de Boric fue " Chile. En cuanto se han conocido los resultados, Evelyn Matthei y Johannes Kaiser han ido la sede de Kast, haciendo explícito su apoyo de cara a la segunda vuelta. En materia de seguridad, los tres han promovido propuestas de mano dura durante la campaña, llegando Kast a proponer el cierre de fronteras y la tipificación de la migración irregular como delito, relacionando así el aumento de la criminalidad con la inmigración.
Kast, favorito
Según el politólogo de la Universidad de Chile Alejandro Olivares, Kast encara la segunda vuelta "con una posición de ventaja gracias a la transferencia de apoyos que ya ha recibido, en el clima político en general, a un gobierno con baja aprobación ya un Congreso con alto apoyo a las ideas de derecha", dice al ARA. El analista duda de que Jara pueda revertir la tendencia: "Requeriría un giro drástico en su tono, en sus propuestas y en sus alianzas para quedarse con el voto de Franco Parisi", asegura. Parisi es el candidato que ninguna encuesta veía venir: uno outsider que se autodefine de centro, que hace propuestas liberales en economía y que secunda la política de mano dura contra la delincuencia, pero que a su vez se percibe como la alternativa "antipolítica" y "antiestablishment" y que representa la "clase media menospreciada", como él mismo ha dicho. Si Jara no logra seducir a este votante, dice el experto, "el escenario más probable es que en la segunda vuelta triunfe Kast".
Aparte de los candidatos a la presidencia, esta primera vuelta electoral ha definido la composición de la Cámara de Diputados y del Senado, donde la derecha también avanza significativamente. Sin llegar a la mayoría absoluta en ninguna de las dos cámaras, sí ganan escaños, mientras que la izquierda pierde. De nuevo, aquí será decisivo el papel del partido de Parisi (Partido de la Gente, PDG) que podría tener la clave en algunas negociaciones. "Debemos tener claro que la derecha que viene no es la derecha tradicional", dice al ARA la politóloga de la Universidad de Chile Claudia Heiss: en esta "derecha que desafía a las élites" incluye también la de Kast, que en el 2019 se escindió de la Unión Demócrata Independiente (UDI) y fundó el acaba de empezar a trabajar de territorio". Heiss ve una tendencia de "derecha antisistema" y concluye que "más que apoyo a un programa y unas ideas de derecha, lo que tenemos es un electorado que se manifiesta contra los partidos y las élites, ya favor de políticas de mano dura y contra la inmigración".