La oposición y el chavismo miden sus fuerzas en la calle
Dos grandes concentraciones refuerzan la guerra de relato, en la que tanto Nicolás Maduro como Edmundo González afirman ser los ganadores de las elecciones
CaracasDesde temprano por la mañana este martes, cientos de personas llegaban a la concentración convocada por María Corina Machado y Edmundo González, de la oposición antichavista, frente a la sede de Naciones Unidas en el barrio Los Palos Grandes de Caracas. La gente llegaba vestida de blanco, el color que la oposición identifica con la paz, frente al clásico rojo del chavismo. Entonando el himno nacional ya los gritos de “libertad” y “Edmundo presidente”, miles de personas se han ido concentrando a la espera de recibir a sus líderes con emoción.
“Venezuela quiere un cambio, y ese cambio sólo se producirá de la mano de nuestro presidente electo, Edmundo González Urrutia”, decía Ana, sosteniendo la bandera nacional. "No nos van a robar el voto", afirmaba. La euforia estalló cuando, tres horas después de la convocatoria, Machado y González llegaban subidos al techo de su camión de campaña, ovacionados.
La “dama de hierro” venezolana ha reivindicado los resultados que desde la sede del partido opositor dieron a conocer el lunes por la noche: una victoria abrumadora para Edmundo González, con más de seis millones de votos, ante poco menos de tres millones que habría obtenido Nicolás Maduro, que fue oficialmente proclamado presidente electo de Venezuela. Las manifestaciones contra los resultados electorales que proclamaron Maduro presidente electo han dejado al menos 11 muertes, según cuatro organizaciones no gubernamentales, informa la agencia Efe.
"No nos busquen para negociar resultados. Aquí lo único que negociaremos será la transición", ha dicho Machado ante la multitud, que ha vuelto a instar a la autoridad electoral a "mostrar las actas [de los resultados] de una vez por todas", una reclamación que han hecho también numerosos dirigentes internacionales en los últimos dos días. "No caigamos en las provocaciones que nos ponen; quieren enfrentarnos", ha añadido la opositora inhabilitada. González Urrutia también hizo un llamamiento a un proceso pacífico: "Que las fuerzas armadas respeten la voluntad popular". Los líderes opositores abandonaron el punto de la convocatoria ovacionados por las masas.
El ejército, con Maduro
Por su parte, el chavismo ha convocado por la tarde a sus seguidores en el Palacio de Miraflores, sede del ejecutivo nacional. A primera hora de la tarde, Nicolás Maduro ha acusado a la derecha de promover un golpe de estado violento, como ya hizo este lunes. El presidente de la Asamblea Nacional y portavoz del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Jorge Rodríguez, ha pedido prisión para González y Machado, y el segundo hombre fuerte del chavismo, Diosdado Cabello, ha sentenciado: “Este pueblo ha luchado mucho para que el fascismo venga ahora a intentar lavarse la cara con unas elecciones que nunca ha ganado". Hasta ahora, el ejército, que tiene un papel clave en la vida política venezolana, se mantiene junto a Maduro, y sostienen la teoría de un golpe de estado fascista.
En la manifestación chavista, Delcy afirma convencida: "Nosotros queremos paz, y la paz sólo la garantiza Nicolás Maduro Moros. La oposición no garantiza paz, ellos quieren muerto, quieren entregar Venezuela a Estados Unidos. Porque nuestra riqueza y los nuestros recursos naturales los quieren Estados Unidos desde hace mucho tiempo” Algunos cánticos de la marcha citaban a Hugo Chávez y otros Simón Bolívar, líder independentista de América. A menudo, se les equipara. , alerta, que camina la espada de Bolívar por América Latina”, cantaban cientos de partidarios del chavismo en el camino hacia Miraflores, mientras el sol dejaba paso a una lluvia tropical que no ha frenado la manifestación de quienes se consideran socialistas y revolucionarios bolivarianos
La guerra de relato está servida, no sólo internamente sino también en el plano internacional. petición que han hecho ya varios países para que se reconozcan las actas electorales que la oposición afirma tener en sus manos y que demostrarían la victoria de Edmundo González en las urnas.
El gobierno de Maduro ha abierto una crisis diplomática con siete países latinoamericanos –Chile, Argentina, Uruguay, Perú, Panamá, República Dominicana y Costa Rica– al ordenar la retirada del personal diplomático de Caracas , por culpa de lo que considera un excesivo cuestionamiento de los resultados oficiales de las elecciones. En el caso de Argentina, el presidente Javier Milei afirma estar considerando romper relaciones con Venezuela.
El secretario general de la ONU, António Guterres, se sumó a la llamada que anteriormente habían hecho Estados Unidos y la Unión Europea e instó al gobierno de Maduro a recontar los votos “con total transparencia”. Brasil, la mayor democracia de América Latina y precursora de estas elecciones, ha vuelto a pedir que se publiquen las actas de las elecciones. El presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, ha argumentado que es la única forma de acabar con las disputas. "Es normal que haya una pelea", ha dicho en una entrevista, y ha sostenido que la forma de resolverla es que el Consejo Nacional Electoral (CNE) "presente las actas" para que, si hubiera dudas, la oposición apele ante la Justicia, cuya decisión "la gente tendrá que acatar".