Francia, ingobernable: ¿cuáles son los escenarios más probables?
Macron quiere buscar una gran coalición, pero si no lo logra, se impondrá un gobierno tecnócrata
ParísDos días después de las elecciones legislativas que han dejado un paisaje inédito en el hemiciclo, sin mayorías claras y con el peligro real de que Francia sea ingobernable, los diputados de la nueva Asamblea Nacional han hecho su rentrée. La sesión constitutiva no se realizará hasta el 18 de julio, pero este martes los diputados ya han recogido sus credenciales y se han tomado las fotografías oficiales.
Los cuatro grandes partidos del Nuevo Frente Popular (NFP), la alianza de las izquierdas, ganador de las elecciones con 182 diputados –muy lejos de la mayoría absoluta–, negocian desde el lunes en reuniones discretas, sorteando a la prensa, el nombre del primer ministro que propondrán al presidente Emmanuel Macron, probablemente a finales de semana. Debe ser una persona de consenso y ponerse de acuerdo no es fácil.
Al presidente de la República le corresponde decidir quién será el primer ministro y cuándo le nombra. La Constitución francesa no da más precisiones, pero la lógica institucional y una norma no escrita –pero siempre respetada– fijan que el primer ministro debe surgir de la mayoría parlamentaria. Si no es así, una moción de censura podría destituirle en cualquier momento.
El Nuevo Frente Popular presiona a Macron para que el primer ministro sea de la coalición de izquierdas, pero el presidente tiene sus reservas y es difícil que lo acepte, sobre todo si el nombre que propone el NFP es de Francia Insumisa, el partido considerado de la izquierda radical de Jean-Luc Mélenchon. Es una de las líneas rojas de los macronistas. Varios de sus diputados han advertido a Macron que un gobierno con un solo miembro de los insumisos será derribado con una moción de censura y que incluso estarían dispuestos a abandonar el grupo parlamentario.
Dos días después de los comicios, sigue la incertidumbre sobre quién será el nuevo primer ministro y cuál será la composición del gobierno. A corto plazo, difícilmente habrá nuevo ejecutivo. El presidente Macron sólo tiene tres o cuatro posibilidades para desatascar la situación y ninguna de ellas es sencilla. Pero tendrá que elegir una porque la Constitución francesa no permite convocar elecciones hasta dentro de un año. Estos son los escenarios más probables:
Gobierno de izquierdas en minoría
Aunque ser la primera fuerza, el Nuevo Frente Popular –formado por insumisos, socialistas, ecologistas y comunistas– ha quedado muy lejos de la mayoría absoluta. Son los vencedores morales de las elecciones, pero no tienen mayoría suficiente para frenar una eventual moción de censura. Con este argumento, lo más probable es que Macron no opte por un gobierno de izquierdas en minoría.
Con todo, las izquierdas no renunciarán a gobernar y pueden pedir a Macron que nombre a un primer ministro de los suyos y se comprometa a no votar una moción de censura en contra. La NFP todavía negocia qué primer ministro propondrá. Los nombres que más suenan son los de los líderes de los partidos, como el socialista Olivier Faure –hoy se ha postulado públicamente– y la líder de los ecologistas, Marine Tondelier, figura en ascenso que ha ganado popularidad durante la campaña de las legislativas. El polémico líder de Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, también está dispuesto a ser primer ministro. "Pero no me voy a imponer", ha dicho en más de una ocasión.
Gran coalición
Macron aún no ha hablado públicamente desde que se conocieron los resultados de las elecciones, pero según fuentes de su entorno, el escenario que privilegia al presidente es una gran coalición con los partidos de izquierdas moderados para poder nombrar a un primer ministro ya un gobierno. Ni él, ni su partido ni sus aliados quieren que la izquierda radical entre en el gobierno. El problema es que socialistas y ecologistas han hecho frente común con el partido de Mélenchon para frenar a la extrema derecha y, por ahora, es difícil que rompan la alianza. En la nueva Asamblea, los cuatro partidos formarán grupos políticos propios, pero la idea es mantener la alianza durante la legislatura.
Macron también tendría complicada una alianza con la derecha porque sumando los escaños de ambos bloques sólo llegan a 210 escaños (o 225 si se alían con 15 diputados de pequeños partidos conservadores). Por otra parte, tampoco es posible una gran coalición entre derecha y extrema derecha que se acerque a la mayoría absoluta: el Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen junto a los conservadores de Éric Ciotti y los diputados republicanos sólo suman 188 escaños.
Gobierno tecnócrata
Ante la imposibilidad de sumar mayorías sólidas, el escenario de un gobierno tecnócrata es la opción más factible. El presidente nombraría a un primer ministro y un gobierno con personalidades que no sean figuras políticas relevantes, siguiendo el modelo del gobierno de Mario Draghi en Italia en el 2021. Y en la Asamblea habría que buscar mayorías puntuales, ley por ley. Si se impone este escenario, lo más probable es que el presidente de la República convoque elecciones legislativas, de nuevo, en un año.