El primer ministro eslovaco reaparece tras el intento de asesinato y culpa a la oposición

BarcelonaEl primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ha reaparecido este miércoles después de sufrir un intento de asesinato el 15 de mayo que le dejó en estado muy grave. El dirigente eslovaco ha publicado un vídeo en su página de Facebook en la que ha agradecido el trabajo de los médicos y en el que, sobre todo, ha aprovechado para cargar contra la oposición y las organizaciones y medios críticos, a quien culpa de haber generado un ambiente de división política y social favorecedor de actos de violencia como el que él mismo sufrió.

Fico ha reforzado así los mensajes que enviaron varios políticos de su partido, Smer, y sus aliados justo después del intento de magnicidio, que responsabilizaban a su oposición. Horas después, la actual presidenta del país, Zuzana Caputová (opositora al primer ministro), y su sucesor, Peter Pellegrini (aliado), comparecieron conjuntamente para hacer un llamamiento a la calma.

Pero el primer ministro ha mantenido el mensaje culpabilizador. "Un activista de la oposición eslovaca intentó asesinarme por mis opiniones políticas", dijo, y aseguró que el intento de asesinato "no fue el ataque de un loco", sino de un "mensajero del mal y del odio político que la oposición políticamente infructuosa y frustrada ha desarrollado en Eslovaquia hasta proporciones incontrolables". "Sólo era cuestión de tiempo que se produjera una tragedia", ha añadido, y ha dicho que llevaba meses avisando de ese peligro.

"Es esperable que las organizaciones políticas no gubernamentales financiadas en el extranjero y la oposición comiencen a minimizar mi intento de asesinato, dirán que fue sólo un ataque de un trastornado, que no tenía ninguna conexión con oposición, que el daño a mi salud no era grave", ha dicho Fico. "Quiero pedir a los medios antigubernamentales, especialmente los de la estructura financiera de George Soros, que no sigan por ese camino y que respeten no sólo la gravedad de los motivos del intento de asesinato, sino también las consecuencias".

Tras el ataque, opositores políticos y miembros de ONG eslovacas (y también ciudadanos) se mostraron preocupados por la posibilidad de que el gobierno lo utilizara de pretexto para aumentar la presión contra la disidencia. En su vídeo, Fico reprochó "el odio y la agresividad de la actual oposición, cubierto y tolerado por los medios, organizaciones no gubernamentales financiadas por países extranjeros y, desgraciadamente, sin respuesta de organizaciones internacionales". Y avisó de que no tiene ninguna duda de que si esto no cambia, "habrá más víctimas".

Fico ha dicho que perdonaba su atacante, por quien no siente "odio", y ha añadido que no tomará ninguna acción legal contra él ni buscará compensación alguna por los daños. El primer ministro prevé poder reincorporarse al trabajo a finales de junio o principios de julio, lo que calificó de "pequeño milagro". El pasado jueves fue trasladado a su casa en Bratislava desde el hospital de Banska Bystrica, en el centro del país, donde fue ingresado y operado de urgencia después del tiroteo. Los disparos de bala en la barriga le perforaron el intestino delgado y tuvo que ser intervenido dos veces. Según el hospital, Fico ya empezó a ingerir alimentos el pasado miércoles, pero la directora del centro indicó que deberá realizar una "larga rehabilitación".