Tres borradores en cuatro días: ¿cuáles son los puntos clave de la negociación por la paz en Ucrania?

Ucrania tendrá que ceder territorio pero no aceptará el reconocimiento internacional de la ocupación rusa, según analistas

Una posición del ejército ucraniano cerca de Pokrovsk, en Donetsk.
5 min

BarcelonaCon la presión de un ultimátum impuesto por Donald Trump con vencimiento este jueves, la maquinaria diplomática involucrada, en mayor o menor medida, en la guerra de Ucrania, trabaja a toda vela. Desde finales de la semana pasada se han redactado, al menos, tres borradores distintos. Lo primero que se filtró en la prensa fue un plan de 28 puntos acordado por Washington y Moscú, rápidamente rechazado por Kiev y Bruselas, que acusaba la administración Trump de bailar totalmente al ritmo del Kremlin. Este domingo, la agencia Reuters publicó los detalles de una contrapropuesta europea elaborada por Francia, Alemania y Reino Unido, también de 28 puntos. Haciendo una comparación punto por punto queda claro cuáles son los elementos más delicados, los que pueden atascar las negociaciones hacia un alto el fuego: la cesión de territorio ucraniano a Rusia, la posibilidad de que Ucrania entre en la OTAN, la amnistía para todos los implicados en la guerra y un plazo máximo para que se convoquen elecciones en el país.

Según ha publicado el Financial Times, que cita al viceministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Serhí Kislítsia, Estados Unidos y Ucrania redactaron este domingo un nuevo texto, en este caso de 19 puntos, aunque deja los aspectos más delicados para que los discutan los presidentes Donald Trump y Volodímir Zelenski. Ahora, cada parte llevará el documento a Washington y Kiiv para informar a los respectivos presidentes y se espera que la administración Trump intente avanzar en las conversaciones con Moscú. Según Kislítsia, el nuevo borrador se asemeja "muy poco" a la versión original, la acordada entre Rusia y Estados Unidos. El secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, confirmó el cambio significativo del plan original. Todo ello hace pensar que el Kremlin le rechazará.

De momento, Moscú ya se ha apresurado a dejar claro que considera "inaceptable" la contrapropuesta que ha hecho Europa, y ha asegurado que sólo trabajará según el primer plan negociado por los enviados de Donald Trump y de Vladimir Putin, Steve Witkoff y Kiril Dmitriev. "Era un plan totalmente ruso, elaborado por dos hombres de negocios, a los que la ideología y la política no les importa lo más mínimo", afirma a la ARA Carmen Claudín, investigadora senior asociada del Cidob experta en Rusia y espacio postsoviético.

Uno de los aspectos que no se incluyen de momento ni en el borrador de EEUU y Ucrania ni en la contrapropuesta europea es el de la cesión de territorio ucraniano. En la reunión de ayer en Ginebra, los ucranianos dijeron que no tenían el poder de tomar decisiones sobre el territorio, ya que, según la constitución de su país, haría falta un referendo para decidirlo. La propuesta ruso-americana prevéel reconocimiento internacional de Crimea, Donetsk y Luhansk como territorio rusoy la retirada de las tropas ucranianas de las zonas que Kiiv todavía controla del Donbás para convertirlas en una zona desmilitarizada perteneciente a la Federación Rusa. A cambio, se congelaría el frente a la línea de contacto y Rusia renunciaría a las partes de Kherson y Zaporíjia actualmente bajo dominio de Kiiv.

La propuesta europea es mucho más ambigua y dice sólo que las negociaciones sobre intercambios territoriales empezarán desde la línea de contacto, es decir, la línea de frente existente, y que Ucrania se compromete a no recuperar su territorio ocupado por medios militares.

Reconocimiento de la ocupación rusa

"Estaríamos de acuerdo en que el alto el fuego se aplicara teniendo en cuenta la línea del frente, aunque es una concesión muy dolorosa para Ucrania. Pero somos realistas y entendemos que, si no hay presión adicional [hacia Rusia] ni apoyo adicional de Occidente, debemos aceptarlo", afirma en el ARA el polit. Sin embargo, subraya que existe una línea roja: el reconocimiento legal de la ocupación rusa. Coincide Claudín: "Que no sea reconocida internacionalmente haría que la cesión fuera más aceptable por parte de la población". Además, la investigadora alerta de que si se produjera ese reconocimiento –como pretende el Kremlin– supondría un precedente muy peligroso para el derecho internacional.

Liana Fix, investigadora senior para Europa en el Consejo de Relaciones Exteriores (ECFR), también opina que la cesión de territorios ucranianos que Rusia no ha logrado ocupar sería "totalmente inaceptable" para Ucrania. "Incluso si debe convertirse en una zona de amortiguación desmilitarizada, no hay ningún mecanismo que pueda impedir la invasión rusa. Los conflictos pasados ​​en Georgia y Ucrania han demostrado que Rusia no respeta las zonas desmilitarizadas", escribe en un artículo en la web del think tank.

Harán alerta de que lo que está haciendo Rusia con su supuesto plan de paz es "una operación psicológica, de desinformación y desestabilización". También lo ve así la periodista Anne Appelbaum, uno de los referentes en Rusia y el espacio exsoviético, que ha llegado a poner este plan inicial, que bautiza como el "pacto Witkoff-Dmitriev", al mismo nivel que el pacto Molotov-Ribbentrop: "El pacto Molotov-Ribbentrop, con sus protocolos secretos, nos va a la protocola secreta' Fría. El pacto Witkoff-Dmitriev, si se mantiene, encajará perfectamente en esta tradición", escribe en The Atlantic.

La expansión de la OTAN como excusa

El otro aspecto clave de las negociaciones es la eventual entrada de Ucrania en la OTAN. La propuesta ruso-americana incluía una cláusula que decía que la Alianza Atlántica "no se expandirá más", un punto que se elimina en la contrapropuesta europea. Según Claudín, éste es uno de los puntos cruciales, "no para que Rusia se sienta amenazada por la OTAN, sino porque podría fortalecer a Ucrania". "Con la Unión Europea no se pone porque no somos nadie en cuestión de seguridad", añade.

Claudín también señala la cuestión de las garantías de seguridad para Ucrania como uno de los elementos más importantes de las negociaciones: "La Ucrania no ocupada por Rusia no puede ser nunca más ocupada. Es evidente que esto debe ser una línea roja para Kiiv; es un interés existencial. Cualquier cosa que no incluya esto." La contrapropuesta europea no incluye muchos cambios respecto al primer borrador, pero sí añade que Estados Unidos debería proteger a Ucrania con un sistema parecido al Artículo 5 de la OTAN, es decir, con una intervención militar en caso de que el país vuelva a ser atacado.

Otros cambios relevantes entre los dos borradores son los referentes a unas futuras elecciones en Ucrania y el límite de soldados con los que puede contar el ejército ucraniano en tiempo de paz. Al respecto, el plan negociado con Moscú exigía comicios presidenciales en un máximo de 100 días una vez alcanzado el acuerdo de alto el fuego, mientras que en el europeo se elimina el horizonte temporal. En cuanto a las fuerzas armadas, el borrador europeo dice que deberían limitarse a 800.000 soldados, 200.000 más que los que marcaba el primer texto.

Presión de China

Claudín se muestra escéptica respecto a las posibilidades de progreso de esa ronda de negociaciones. "Si hubiera equipos diplomáticos y políticos bregados, serios, podrían navegar en todos estos aspectos, en las cesiones de cada parte, pero no es el caso", lamenta, en referencia a Witkoff y Dmitriev.

"La única esperanza sería que Pekín presionara un poco al Kremlin", dice. Considera que a Xi Jinping, en parte, le va bien el conflicto, porque tiene Washington distraído y puede sacar beneficio económico, pero, al mismo tiempo, es una fuente de inestabilidad constante que lleva casi cuatro años durando. Además, apunta que el empeoramiento de la economía rusa y su efecto en los ciudadanos también puede ser un elemento que posibilite un acuerdo: "Si China hace un mínimo de presión y a Putin le llega algún consejo sabio que la gente ya está en una situación algo límite, podría vender como una victoria lo logrado, y quizá se podría avanzar hacia un acuerdo".

stats