Hamás entrega los cadáveres de cuatro rehenes, incluidos dos niños, mientras se negocia el futuro del alto el fuego

BarcelonaHamás ha entregado este jueves a Cruz Roja los cuerpos de cuatro rehenes israelíes secuestrados el 7 de octubre del 2023, mientras se negocia la segunda fase del frágil alto el fuego en Gaza. Los cuerpos son de Shiri Bibas y sus dos hijos, Kifr y Ariel, que cuando fueron secuestrados tenían 9 meses y 4 años. El cuarto es Oded Lifshitz, un hombre de 83 años, pacifista y marido de Yocheved Lifshitz, que desde que fue liberada el pasado año ha sido una de las voces más prominentes para pedir un alto el fuego. Hamás dijo en noviembre del pasado año que la mujer y los niños habían muerto en un bombardeo israelí, aunque Tel-Aviv no lo había confirmado. La familia es un símbolo del trauma israelí en el ataque palestino y también del precio que tiene para los rehenes la política del gobierno Netanyahu de rechazar un alto al fuego para posibilitar su liberación.

La entrega se ha hecho en el sur de Gaza, en Khan Younis —que el ejército israelí allanó para convertirlo en el centro de operaciones de la invasión del sur de Gaza—, con un fuerte despliegue de milicianos armados de Hamás y la Yihad Islámica. Se trata del primer regreso de rehenes fallecidos, y no se espera que Israel confirme sus identidades hasta que se hayan realizado las pruebas de ADN. Los féretros se han presentado en un escenario con una pancarta en la que se ve una caricatura de Netanyahu como si fuera un vampiro ensangrentado con las imágenes de los muertos debajo.

Los féretros, de color negro, han sido transportados en vehículos de Cruz Roja y entregados al ejército israelí dentro de Gaza, que les ha trasladado al instituto Nacional Forense, donde deben ser identificados, un proceso que puede tardar horas o días. El convoy ha pasado por delante del kibutz de Nir Oz, que era su casa. Nir Oz fue una de las comunidades israelíes con más víctimas en el ataque palestino del 7 de octubre. El padre, Yarden Bibas, también fue secuestrado y fue liberado en los intercambios de rehenes por prisioneros palestinos de ese mes. Hoy no habrá liberación de palestinos.

El presidente pide perdón

La jornada es de alto voltaje político en Israel. El politólogo israelí Akiva Eldar recuerda en declaraciones a Al Jazeera que "estas criaturas se han convertido en un símbolo de la estupidez del gobierno israelí, de su falta de respeto por los valores judíos": "Ahora la cuestión es cómo detenemos el sacrificio de más criaturas inocentes en esta guerra", dice El .

Según ha investigado la prensa israelí, Hamás ofreció a devolver los cuerpos de los rehenes fallecidos a los bombardeos israelíes en noviembre de 2023, pero el gobierno israelí lo rechazó.

El propio presidente de Israel, Isaac Herzog, ha pedido perdón. "En nombre del Estado de Israel, inclino la cabeza y pido perdón. Perdón por no protegeros en ese terrible día. Perdón por no llevaros a casa de forma segura", ha escrito en la plataforma X.

Netanyahu, por su parte, ha dicho que todos los israelíes están "unidos en un dolor insoportable" y ha prometido que Hamás deberá "rendir cuentas". "La voz de la sangre de nuestros seres queridos nos clama desde la tierra. Nos obliga a llegar a un acuerdo con los viles asesinos, y les haremos rendir cuentas", ha dicho en un vídeo, después de que la familia de Oded Lifshitz haya confirmado que uno de los cuerpos es el de este hombre.

Más liberaciones el fin de semana

El alto el fuego es muy frágil y debe continuar el sábado con la liberación de otros seis rehenes a cambio de 500 prisioneros palestinos, la mayoría mujeres y criaturas detenidos por el ejército israelí en Gaza en la actual ofensiva. Hamás adelantó la liberación de los cuerpos este jueves y la aprovechó para hacer otra demostración de fuerza, mientras mantiene su compromiso con el alto el fuego. Hasta ahora han liberado a 19 rehenes de los 33 previstos, pero la clave es qué ocurrirá el 1 de marzo, cuando debería entrar en vigor la segunda fase del alto el fuego, que prevé la retirada total de las tropas israelíes de Gaza y el alto el fuego permanente.

Hamás se ha ofrecido a liberar de golpe a los 60 rehenes que deberían ser devueltos en la segunda fase si Israel acepta la tregua permanente. Los ministros de ultraderecha de Netanyahu le presionan para abandonar el acuerdo, aunque el alto el fuego está respaldado por la mayoría de la población. Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump defiende la expulsión de los palestinos de Gaza, una limpieza étnica que dinamita la posibilidad de un acuerdo. El 27 de febrero se ha convocado una cumbre de la Liga Árabe en El Cairo donde se supone que los países árabes presentarán su plan en respuesta a la Casa Blanca.