Afganistán

Matan a tiros a una exdiputada afgana que se quedó en el país a pesar del regreso de los talibanes

Ningún grupo se ha atribuido el asalto contra Mursal Nabizada, en el que también murió uno de sus guardaespaldas

ARA
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Una foto de la exdiputada afgana Mursal Nabizada, asesinada a disparos en Kabul.

BarcelonaLa exdiputada afgana Mursal Nabizada, una de las pocas políticas que se quedaron en el país después de que los talibanes recuperaran el control, ha sido asesinada a tiros en su casa en Kabul este fin de semana. En el ataque, cometido por individuos no identificados, también murió uno de sus guardaespaldas. Nabizada, que tenía 32 años, ocupó un escaño en el Parlamento de Afganistán desde 2018 hasta que los talibanes derribaron el gobierno, en agosto de 2021, después de la retirada de Estados Unidos.

Las autoridades policiales han asegurado que han iniciado "una investigación seria" para encontrar a los autores del crimen. De momento, ningún grupo ha reivindicado el asalto. Este tipo de asesinatos, generalmente contra líderes políticos, religiosos, periodistas y otras figuras importantes de la sociedad civil, no son extraños en Afganistán, y generalmente se atribuyen a los grupos armados que operan en el país. Los últimos ataques, desde el regreso de los talibanes, han sido reclamados por Estado Islámico.

"A pesar de que le ofrecieron la opción de marcharse de Afganistán, eligió quedarse y luchar por su gente", ha destacado la también exparlamentaria Mariam Solaimankhil, que la ha descrito como "una auténtica pionera". "Nabizada se quedó en Afganistán para luchar por los derechos de las mujeres y las niñas", ha dicho también Tirana Hassan, directora ejecutiva interina de la ONG Human Rights Watch. "Ella fue asesinada en la oscuridad, pero los talibanes construyen su sistema de apartheid de género a la luz del día", ha dicho la europarlamentaria Hannah Neumann, apuntando a las medidas del régimen fundamentalista contra las mujeres.

Poco después de recuperar el poder, los talibanes prohibieron que las funcionarias pudieran trabajar y excluyeron a todas las mujeres de las posiciones de poder en el gobierno, y desde entonces han ido creciendo los ataques contra los derechos de las mujeres con medidas como el imposición del velo, la prohibición de que puedan practicar deporte y el veto a las universidades y las escuelas secundarias, en un intento de relegar a las mujeres al ámbito doméstico.

Problemas de seguridad

El régimen talibán asegura que se centra en hacer de Afganistán un país seguro para que sus ciudadanos puedan volver, a pesar de estas vulneraciones de los derechos humanos y los varios ataques que se han producido en los últimos meses. La semana pasada, por ejemplo, Estado Islámico reivindicó un atentado contra el ministerio de Exteriores, en Kabul, con al menos una veintena de muertos.

La Unión Europea ha afirmado este lunes que el asesinato de Nabizada muestra la "grave situación" de seguridad a la que se enfrentan los afganos. "Su muerte es un brutal recordatorio de la grave situación de la población y de las amenazas a la seguridad, especialmente para las mujeres", ha escrito en Twitter Nabila Massrali, portavoz del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.

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