Ottawa declara el estado de emergencia por el bloqueo de los camioneros antivacunas
La marcha contra la obligatoriedad de las vacunas ha recibido ayuda financiera de los Estados Unidos y el apoyo de Trump
BarcelonaLa capital de Canadá, Ottawa, ha declarado el estado de emergencia este domingo después de diez días de huelga y bloqueo de los camioneros, que ocupan varias calles con sus vehículos y mantienen paralizado el centro de la ciudad. La manifestación de los camioneros, que arrancó hace diez días en contra de la obligatoriedad de las vacunas para los que cruzaran la frontera, pide ahora el fin de todas las restricciones sanitarias y la dimisión del primer ministro, Justin Trudeau. Con apoyo financiero que les llega desde círculos republicanos de los Estados Unidos, los camioneros se han convertido en una pesadilla para los ciudadanos de Ottawa, asediados por el ruido constante de sus bocinas, el bloqueo del tráfico en varias vías e incluso amenazas e intimidaciones.
Miles de manifestantes han llegado a lo largo de este pasado fin de semana a la ciudad para sumarse al centenar de camioneros que se habían mantenido desde el principio acampados con los camiones en Ottawa. Los camioneros, que se autodenominan Convoy de la Libertad, aseguran que no se marcharán hasta que no se abola la obligatoriedad de las vacunas. Algunos han hecho ondear banderas con la esvástica nazi y banderas confederadas, según Reuters.
Según el alcalde de la ciudad, Jim Watson, la declaración del estado de emergencia "refleja el peligro serio y la amenaza a la seguridad para los residentes que suponen las manifestaciones que siguen en marcha". Watson ha pedido también la ayuda de "otras jurisdicciones y niveles de gobierno" para gestionar la situación y ha explicado que la declaración de emergencia le permitirá comprar material para los equipos de emergencia y de seguridad. El domingo por la noche la policía confiscó más de 3.200 litros de gasolina que se habían almacenado en el aparcamiento del estadio de béisbol de Coventry Road para suministrar a los camiones en protesta.
Con el apoyo de Trump
Con el sonido constante del claxon como arma principal, los camioneros se han instalado en la calle con todo tipo de provisiones, alguna cocina comunitaria e incluso algún castillo hinchable. El bloqueo se ha nutrido en buena parte de financiación que le llegaba de los Estados Unidos, e incluso el expresidente de los Estados Unidos Donald Trump ha expresado públicamente su apoyo a la protesta canadiense. "El Convoy de la Libertad protesta pacíficamente contra las duras políticas del lunático de extrema izquierda Justin Trudeau, que ha destruido Canadá con insensatas órdenes derivadas del covid", decía el expresidente norteamericano en un comunicado.
La web GoFundMe retiró la página de donación del Convoy de la Libertad, argumentando que violaba las condiciones del servicio por actividades ilegales. La decisión causó las quejas de algunos miembros del Partido Republicano de los EE.UU., como el gobernador de Florida, Ron DeSantis. "Las relaciones con los EE.UU. solían ser principalmente para resolver problemas técnicos. Desgraciadamente, hoy Canadá está experimentando la injerencia de políticos norteamericanos radicales que se implican en temas internos canadienses. Trump y sus seguidores son una amenaza no solo para los EE.UU. sino para todas las democracias", decía en Twitter el ex embajador canadiense en los Estados Unidos Bruze A. Heyman. Y añadía: "En ningún caso ningún grupo de los EE.UU. tiene que financiar actividades disruptivas en Canadá. Punto".
La policía de Ottawa –sobrepasada en número este fin de semana, según el alcalde– ha reubicado a algunos de los manifestantes y ha cortado accesos, mientras dice que "recoge los registros de los vehículos y otras evidencias que serán utilizadas en procesos penales". La policía ha explicado que hay cuatro personas imputadas por crímenes de odio y que están investigando amenazas a personas públicas. "Claramente estamos superados en número y estamos perdiendo esta batalla. Esto se tiene que revertir: tenemos que recuperar nuestra ciudad", decía el alcalde en una entrevista en la radio canadiense.
El gobierno de Trudeau insistía este mismo domingo en que no habrá marcha atrás en la vacunación obligatoria. El primer ministro, Justin Trudeau, que está aislado después de haber dado positivo por covid-19, ha dicho también que su gobierno no se dejará intimidar por la protesta de una "pequeña minoría radical", pero ha descartado desplegar el ejército para echar a los camioneros. Por motivos de seguridad, Trudeau y su familia se han marchado de la casa que tienen en Ottawa y no se ha informado de dónde se han instalado.
El 90% de los camioneros canadienses y el 79% de la población en general han recibido ya dos dosis de la vacuna del covid-19, según Reuters. Pero, en la oposición a Trudeau, representantes del Partido Conservador han manifestado abiertamente su apoyo a la protesta y algunos de ellos se han hecho incluso selfies con los camioneros. De hecho, la semana pasada el partido echó a su líder, Erin O’Toole, que perdió las elecciones ante Trudeau el año pasado, y uno de los motivos fue precisamente que no había dado suficiente apoyo desde el principio a la protesta de los camioneros.
