El trompazo de Lucy de 'Dallas', otra vez

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Charlene Tilton entrevistada por Ricard Ustrell.

Este sábado, en Colapso, Ricard Ustrell entrevistó a Charlene Tilton, la actriz que interpretó Lucy de Dallas, la serie que cada domingo congregaba a los catalanes ante la pantalla en los inicios de TV3. No era uno de los personajes especialmente emblemáticos ni más queridos de la telenovela, pero la mujer se ha convertido en una especie de leyenda de la televisión pública gracias, sobre todo, al resbalón sobre el escenario delÁngel Casas Show en 1984. La entrevista del Colapso no era la primera que se le hacía en nuestro país en estos cuarenta años. Ya la entrevistó Alfons Arús en los noventa, y en el homenaje a Àngel Casas que presentó Albert Om también conectaron. TV3 recurre de vez en cuando a la actriz para recordarle, una y otra vez, cómo se jodió de cabeza. Cuando le llaman de Barcelona ya sabrá qué imágenes le esperan.

Esta vez, ya que tenía que volver a pasar el trance, Charlene Tilton lo hizo venir bien para incorporar, en el lote de contratación, la presencia de su hija, la actriz y cantante Cherish Lee. Y no sólo como acompañante, sino para realizar una actuación musical para promocionarla. Uno bonus familiar de dos por uno que quedó algo forzado. Puesta en calzador, Lee cantó una canción con la banda musical del programa. Todo sea para poder hacerle memoria a Tilton sobre el trompazo.

Pero la entrevista del Colapso sirvió para ver cómo, con el paso de las décadas, la mirada y la sensibilidad cambian. Cuando ahora se recuperan las imágenes de Charlene Tilton conversando junto a Ángel Casas y se le pregunta si había bebido con tono burlón, ya somos capaces de hacer una lectura más prudente de ese momento. Y, en las imágenes de archivo detectamos a una chica muy joven y frágil bajo los efectos del alcohol. Incluso da lástima. En el 2021, en el homenaje a Àngel Casas, Tilton ya lo dijo: "Estaba pasando un momento terrible de mi vida". Y parece bastante obvio.

Una cosa es cómo recordamos determinados momentos y, otra muy diferente, qué pensamos cuando los volvemos a ver. El contexto social, la época y, posiblemente, nuestra madurez nos hacen percibir aquellos instantes de otra forma. Y más, sabiendo la historia que cuenta Tilton sobre su niñez y la vida con su madre enferma. Más que reír de aquella chica desinhibida, se te hela un poco la sonrisa. No será fácil para Charlene Tilton verse a sí misma en esas condiciones.

En la necesidad de emular aquella televisión venerada por efecto de la nostalgia y hacerse heredero, Ustrell ha ido recuperando algunas de estas estrellas de los ochenta que pasaron por TV3: Charlene Tilton, Samantha Fox o, salvando las distancias, Ana Obregón. El presentador las recibe con gran veneración.

Cuarenta años no pasan en vano, incluso en la forma de concebir una televisión pública. E intentar reproducir determinadas entrevistas no tiene, en ningún caso, el mismo resultado que el recuerdo que hemos construido a su alrededor.

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