El gag suprimido de ‘Bricoheroes’ enfrenta a creadores y dirección
Vicent Sanchis afirma que la retirada no tiene nada que ver con cuestiones políticas
El plató del Planta baixa mostró este lunes, sin mercromina, la herida abierta entre el director de TV3, Vicent Sanchis, y uno de los cómics más populares que trabajan para el canal, Lluís Jutglar, conocido como Peyu. El motivo de la discordia es la supresión de un fragmento del programa Bricoheroes en el que el humorista, tras pincharlo sobre qué pediría si tuviera dinero casi infinito, espetaba: "Que me la chupase Letizia Ortiz".
Sanchis había acudido al programa del magacín matinal para rebatir algunas de las acusaciones que Jutglar había dejado escritas el día anterior en un tuit y en las que atribuía la decisión de censurar ese fragmento a motivaciones políticas y para no molestar a la Casa Real. El cómico no estaba invitado a participar, pero, después de que se quejara por Twitter, pudo intervenir por vía telefónica. El choque entre ellos dos generó un momento televisivo intenso e inédito -pocas televisiones muestran los conflictos internos ante las cámaras- que derivó entre un intercambio de reproches entre el creador y el directivo.
Futuro incierto
El baile de reacciones había empezado ya un par de horas antes, cuando Sanchis había intervenido en El matí de Catalunya Ràdio. Ahí hizo notar su malestar por el hecho de que lo acusaran de encogerse políticamente. “A mí me han dicho de todo y estoy procesado por cuestiones políticas”, explicaba el director a Laura Rosel, recordando que espacios como Polònia o documentales han hecho “críticas, sarcasmos y humor negro” alrededor de la monarquía. Y aseguró que él mismo debe de ser quien más ha defendido el programa, puesto que en una veintena de ocasiones ha tenido que responder a preguntas parlamentarias en el marco de la comisión de control de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA). “Pero es que aquí se está hablando de una mujer y su hija. Y no dice «la reina», dice «Letizia Ortiz»”, se quejaba Sanchis, que pedía hacer el ejercicio de poner el nombre de cada uno, o de una hija, en ese gag. “Tomamos decisiones continuamente y los límites de dónde puede llegar el humor son opinables, pero aquí hay una tirada machista, misógina e incluso pedófila que es una frontera que no se puede cruzar”.
Esta referencia a la pedofilia la hacía por siete segundos del gag que Jutglar no compartió, porque había accedido a eliminarlos. En esos segundos se ve a Jair Domínguez cuando, después de regañar a Peyu, le dice: “¡Es poco de rico, es poco de rico! Me hubieras dicho la hija...”, y los dos se parten de risa. Pero, enseguida, Domínguez se levanta y dice: “No, la hija es excesivo”. El humorista explicó que ellos entendieron que esa cola no se podía emitir, pero defendía el resto del gag. “En el contexto en el que lo decíamos, cualquier persona acostumbrada a consumir humor o que haya visto programas de la BBC mucho más extremos lo entendería. Aquí son dos locos encerrados en un taller que dicen barbaridades. Es la gracia del formato y por eso ha atrapado a los jóvenes y es de las pocas cosas que consumen en catalán. Lo hacen porque somos transgresores”. El cómico lamentó que la filtración de estos siete segundos extras se hubiera hecho desde un servidor de vídeo de TV3. Sanchis, por su parte, le reprochó el hecho de utilizar unas imágenes que no le pertenecen -el programa es una producción de TV3- para denunciar la supresión del fragmento. “Legalmente es reprobable, pero evidentemente no lo haremos”.
Más allá del debate, un Sanchis visiblemente enfadado sugirió que el programa no tiene garantizada su emisión por televisión. “La tercera temporada estaba aprobada”, explicó a Catalunya Ràdio. “Saldrá por internet, mientras el consejo de gobierno no decida otra cosa. O lo hablemos entre todos. Porque lo que ha hecho este señor es muy grave”. El programa se había estrenado por internet y tenía previsto llegar a la TDT el año que viene, a pesar de que las palabras de Sanchis sitúan dudas ahora sobre este extremo. “Es que no puede mentir”, dijo en relación a las motivaciones que Jutglar atribuyó a la supresión del gag. “O justificar una historia que es injustificable. Tiene un contrato de lealtad empresarial, mercantil. Ya lo veremos, pero esto no puede ser”, concluyó el directivo.
En todo caso, en el Planta baixa, cuando le preguntaron si Peyu seguirá trabajando para TV3, dijo: “Evidentemente que tiene que poder seguir, pero lo que le pido es que cuando hace según qué afirmaciones y especulaciones... que sean ciertas y que hable con las otras personas. No estaría en esta casa si no pensáramos que su humor vale la pena. Si trazas una teoría conspirativa, que los datos sean ciertos”. A repreguntas de los colaboradores del programa sobre qué consecuencias preveía, dijo: “Yo no amenazo a nadie, pero según qué cosas... Hay una nueva situación y tenemos que ver qué pasa”.
Reaccions en las redes
El responsable de los programas de entretenimiento de TV3, Cristian Trepat, también quiso incidir en la polémica. Lo hizo con un extenso hilo de Twitter. “Lamento profundamente el hilo de tuits que hizo ayer [Peyu] porque su exposición es sesgada e injusta. Porque está llena de medias verdades y alguna mentira. Y, sobre todo, porque es populista y, conscientemente, nos pone a los pies de los caballos a los profesionales que hemos defendido Bricoheroes en las diferentes comisiones de valoración estos años”, aseguraba en uno de los mensajes.
También cargó contra el humorista la consellera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge -nombrada por ERC-, con un tuit en el que mostraba su descontento por el gag. “No lo sé, Rick. Presentar un gag o un chiste como transgresor e irreverente recurriendo al machismo de toda la vida... en 2021”, y lo acompañaba de un emoji bostezando. Jair Domínguez, el compañero de armas de Jutglar en Bricoheroes, hizo dos tuits claramente relacionables con el asunto: “Qué gusto ir viendo cómo caen las máscaras” y “Veo que estáis muy exaltados, chochetes”.