Milei y quejarse de que te han echado un vistazo al puño

Cómo será el odio a Pedro Sánchez de parte de los diarios de derechas españoles que, en el encontronazo diplomático abierto con Argentina, prefieren aparcar su habitual nacionalismo patriotero para apoyar a Javier Milei. O, al menos, para convertir a Sánchez en el agresor y no en el agredido. Yo no le he dado un puñetazo, señorita, ha sido él quien, con el ojo, ha agredido a mi pobre puño. Un repaso a los diarios argentinos evidencia que la tierra es redonda, es decir, que el dignatario sudamericano es quien ha provocado la crisis, tachando de corrupta a la mujer de Sánchez, sin que pese ninguna condena sobre ella y sólo por unas diligencias abiertas que hacen un tufo de chamuscado severo. ¿Presunción de inocencia? No para el anarcocapitalista de la sierra eléctrica y la pobreza disparada en su país. En el quiosco de Madrid, incluso La Razón admite que el incidente lo ha provocado Milei (y eso que el diario es del mismo grupo que ha editado su último libro). En cambio, los titulares delAbc y El Mundo giran la noticia como un calcetín: "El gobierno abre una crisis diplomática con Argentina después de los insultos de Milei" y "Sánchez abre una crisis diplomática por los ataques de Milei a su mujer".

Es un detalle sutil, pero a menudo la mala baba periodística se esconde en estas aparentes tormentas. Y sí, los insultos aparecen en la frase, pero si es Sánchez quien declara la crisis, la provocación previa queda entonces fuera de la ecuación. En el caso deEl Mundo, incluso, se podría inferir que buscan criminalizar a Sánchez, por estropear las relaciones con Argentina sólo para defender el honor de su mujer. Como si doblega sus obligaciones de mandatario por un frívolo asunto personal. Y, una vez más, existe la naturalización del insulto. Que sólo viaja en un sentido, claro.