Santa paciencia, con la pobre ciencia

Un año más, sucumbo a la ya tradición de Navidad de mirar qué ha dado de sí la impagable sección de ciencia deEl Españoll, en la que el pescacliquismo se alía con las noticias absurdas... según un estudio. español" (sí, concretamente un descanso eterno, si te despistas). O bien: "El cerebro todoterreno de los taxistas: resisten mejor a la demencia y mueren menos de Alzheimer". No faltan las promesas de una vida mejor y centenaria: "Las personas que toman kiwi en España una hora antes de acostarse se duermen un 50% más rápidamente" (sobre todo si es en comparación con un gintónic Hay que notar también como muchos titulares, por lo de posicionarse bien en los buscadores se añade un "en España" que hace cuestionarse si los efectos del kiwi, una vez que los tomas atravesados ​​los Pirineos, dejan de ser efectivos) O también: "Esta es la salsa española que toman para vivir más de 100 años en la isla más longeva: tradicional y sana" (una especie de alioli).

Muchas de estas noticias en el fondo mueven a una sonrisa piadosa, porque nadie con dos dedos de frente se las tomará en serio. Pero en el fondo rozan la irresponsabilidad o el sensacionalismo cuando reducen toda la complejidad de la medicina a unos síntomas sencillos como cuando afirman: "Esa es la sencilla prueba de que detecta a qué mujeres sufrirán un infarto con hasta treinta años de previsión". Por último, no faltan grandes titulares sobre la vida sexual de los animales. Este año han destacado: "Un delfín en busca de pareja atemoriza a Japón: le acusan de hasta dieciocho ataques a bañistas" o también "Muere Sphen, el pingüino gay más famoso del mundo: su pareja se despide cantando" . Está bien acercar la ciencia al lector generalista, pero aquí hablamos exactamente de lo contrario: de desdibujarla para arrebatar un puñadito de clics.