TV3 monta una noche de karaoke con misterio y romanticismo para su nueva serie

La televisión pública renueva la ficción de producción propia con historias cruzadas en un restaurante chino

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La Ola, a la izquierda, comparte aventuras al karaoke con el Nilo, la Sara y el Cris

BarcelonaUna noche de karaoke puede dar lugar a momentos épicos, surrealistas e irrepetibles, como demuestra la nueva serie de TV3 L'última nit del karaoke, que a partir de lunes ocupará el vacío dejado por Crims. Producida por El Terrat, la comedia juega con la estructura de las historias cruzadas, un esquema clásico explotado en muchas ficciones y que tiene como principal atractivo un gran abanico de personajes que permiten a los espectadores elegir y remover. La serie debuta en TV3 con la emisión de los dos primeros episodios (tiene diez en total).

El hilo conductor es Ona (Roser Tapias), la cocinera y encargada del restaurante karaoke Imperial del Sr. Wang (Alberto Jo Lee), un local que, según se nos explica en el primer episodio, acabará en llamas después de una noche de tensión. Descubrir quién ha sido el o la responsable del incendio es uno de los ejes de la serie, que se desarrolla siempre dentro del local, que se montó dentro del antiguo cine Astoria de Barcelona. "Lo que le pasa a Ona es que está en un punto vital en el que sus expectativas no se han acabado de cumplir y con 30 años se encuentra con que todavía trabaja en un karaoke a pesar de que le gustaría estar en un restaurante de categoría", explica Roser Tapias. El reparto de la serie, formado por más de cuarenta actores, cuenta también con Elisabet Casanovas y Artur Busquets, que interpretan a Sara y a Cris, los compañeros de trabajo y amigos de Ona, y Àlex Maruny, que interpreta a Nil, un extrabajador del karaoke que vuelve a Barcelona después de un tiempo viajando. El equipo de trabajadores del karaoke lo completa Yan Yan, interpretada por Sana Yumii, una camarera de humor sarcástico.

Una de las habitantes ocasionales del karaoke del señor Wang es Ali (Júlia Molins), que ha escogido este escenario para tener una cita a ciegas con Ale, un chico con quien hace tiempo que habla a través de una aplicación pero a quien nunca ha visto. Un chico misterioso que lleva una bolsa negra, interpretado por Pep Ambròs, parece ser el amor que hace rato que espera. Mientras Ale comparte una cena un poco extraña con su cita, Carolina (Alicia Reyero) y Martí (Jordi Díaz) se encuentran con su grupo de amigos de toda la vida, con los cuales comparten una sala VIP para cantar y hacer bromas (y esconder unos cuantos secretos). El ecosistema del karaoke se completa con una estrella del rock, interpretada por Joan Dausà, que se reencuentra con un antiguo amor, una despedida de soltera que tiene pinta de no acabar muy bien y una reunión familiar con sorpresa. Por el medio, el señor Wang tiene que hacer equilibrios para mantener en marcha el restaurante karaoke.

Una serie cargada de música

Como no podía ser de otro modo, las canciones juegan un papel importante en la nueva serie de TV3. Sonará mucha música, desde éxitos del pop y el rock que son elecciones clásicas de karaoke, como Don't stop me now de Queen y Total eclipse of the heart de Bonnie Tyler, hasta temas catalanes de grupos como Buhos, Els Catarres y Joan Dausà, que interpreta a uno de los personajes de la ficción y canta dos canciones, una inédita. Estas canciones son las que protagonizarán los números de sing along –escenas pensadas para que los espectadores también canten en su casa con la ayuda de la letra sobreimpresionada– y que están estrechamente relacionadas con las historias de los personajes que las cantan. "Hay un punto de catarsis, a veces las cosas que nos cuesta más decir con palabras las expresamos más fácilmente con el micrófono en mano y encima de un escenario, aunque parezca paradójico", explica Pedro B. Abreu, el creador de la serie. “En esta coctelera de historias y emociones agitadas en una misma noche de fuego y de liberación, hay un desfile de personajes que necesitan desesperadamente subir al escenario y volver a brillar, aunque solo sea durante los escasos tres minutos que dura una canción", añade Abreu, que señala que también hay composiciones hechas expresamente para la ficción.

El creador explica que una de las principales dificultades de escribir una serie tan coral es que las historias estén compensadas: "Intentar que en todas las tramas haya un color y un sabor para cada personaje es todo un reto, y conseguir que todos los sabores que pones en la coctelera tengan un saber agradable es otra de las dificultades". Además de la mezcla de personajes, también hay de géneros, porque se pasa desde la comedia romántica al thriller o la acción. Para Abreu, la serie tiene "todo de dramedia, porque hay momentos emotivos, pero sobre todo son historias muy humanas, a pesar de que tenga una apariencia desenfadada y divertida".

La serie es autoconclusiva, a pesar de que los responsables de TV3 han asegurado que si la ficción funciona se podrían plantear una continuación, una opción que sería factible porque, como reconocía Agustí Esteve, director ejecutivo de El Terrat, L'última nit del karaoke puede dar lugar a muchos spin-offs.

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