El descanso, el amuleto perfecto para la selectividad
El sueño es un aliado clave para un buen rendimiento en los exámenes
Son tiempos de exámenes para los estudiantes. Mientras los universitarios afrontan las últimas pruebas del curso, los alumnos de segundo de bachillerato realizan los últimos esfuerzos para preparar la selectividad y así entrar en el grado universitario deseado. En estas situaciones de presión y nervios, es fácil caer en la tentación de sacrificar horas de sueño por tener más tiempo de estudio. Sin embargo, es importante recordar que el sueño es un aliado clave para un buen rendimiento en los exámenes.
El sueño desempeña un papel fundamental en la consolidación de la memoria y el aprendizaje. Mientras dormimos, nuestro cerebro procesa y organiza la información que hemos adquirido durante el día y fortalece las conexiones neuronales. Esto nos permite recordar y aplicar el conocimiento de forma más efectiva.
La falta de sueño puede afectar negativamente a la capacidad de concentración, la memoria y la toma de decisiones, elementos cruciales tanto para el estudio como para las pruebas académicas. Por eso es esencial mantener un equilibrio entre estudio y descanso.
Aquí os dejamos algunos consejos para poner el sueño a su favor:
- Planificar horarios de estudio y descanso: además de marcar horarios de estudio, es crucial establecer un horario regular de sueño. Esto implica fijar una hora límite para el estudio y reservar al menos una hora antes de acostarse para relajarse y prepararse para el descanso.
- Revisión previa al sueño: aprovechar el poder del repaso nocturno es una estrategia eficaz. Antes de dormir, intente dedicar 5 minutos a repasar brevemente los conceptos clave que le cuesta recordar. Esta revisión justo antes de dormir puede ayudarle a retener mejor la información.
- Dormir lo suficiente: es fundamental respetar las necesidades individuales de sueño. Tanto adolescentes como adultos requieren una cantidad adecuada de sueño para un rendimiento óptimo. Asegúrese de dormir entre 8 y 10 horas si son adolescentes, y entre 7 y 9 horas si son adultos.
- Descansos de verdad: durante los descansos de estudio, es importante desconectar completamente de las pantallas y actividades estimulantes. Opte por actividades como pasear, realizar un poco de ejercicio o practicar técnicas de respiración para refrescar la mente y reanudar el estudio con energía renovada.
En resumen, mantener un buen equilibrio entre estudio y descanso es esencial para afrontar con éxito los exámenes de selectividad y otras pruebas académicas. No deje que la presión de los exámenes le haga olvidar la importancia del sueño en su rendimiento académico. Con una buena planificación y hábitos saludables de sueño, estará mejor preparados para afrontar los retos que se le presenten durante este tiempo de exámenes.
Dr. Antoni Esteve
