La Generalitat presenta un nuevo impuesto sobre la contaminación portuaria de los grandes barcos
El Govern calcula una recaudación de 7,5 millones con el nuevo tributo
BarcelonaEl departamento de Acción Climática de la Generalitat ha presentado este viernes un nuevo impuesto que grava las emisiones portuarias de los barcos de gran tonelaje. Con el nuevo tributo, el Govern espera ingresar unos 7,5 millones de euros anuales.
El dinero recaudado con el impuesto se destinará al fondo para la protección del ambiente atmosférico, gestionado por el propio departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural y que financia gastos e inversiones de la administración en protección del atmósfera, reducción de la contaminación acústica y mejora de la calidad del aire. "Necesitamos apretar el acelerador de la transición verde, adaptarnos a los nuevos escenarios y mitigar los efectos negativos de todo lo que hasta ahora no hemos hecho bien", ha asegurado el consejero de Acción Climática, David Mascort, en la rueda de prensa de presentación del nuevo tributo.
La creación del impuesto es un mandato de la ley del cambio climático aprobada en 2017 por el Parlamento de Cataluña. El texto legal ha superado la primera fase de audiencia e información pública, pero todavía debe recibir un dictamen previo del Consejo de Trabajo, Económico y Social antes de ser aprobado por el consejo ejecutivo. Cuando el Gobierno lo apruebe, el texto se enviará al Parlamento.
"Objetivo ambiental"
El nuevo impuesto afectará a barcos de más de 5.000 toneladas y deberán abonarlo las empresas navieras y armadoras. Según el Govern, afectará principalmente a "transbordadores, tanques, portacontenedores, cruceros, petroleros, cargueros y otros considerados grandes barcos que atraquen en puertos catalanes". El importe a pagar será de un euro por cada kilogramo de óxidos de nitrógeno (NOx) y materias particuladas (PM) emitidos por embarcación, con una carga media de 759 euros por nave, según estimaciones del departamento.
Sin embargo, la Generalitat ha asegurado en un comunicado que "el objetivo es ambiental y no recaudatorio", por lo que ha incluido bonificaciones en las naves que tengan certificados de mejora energética o de registro en el sistema de gestión y auditoría ambiental de la Unión Europea. Igualmente, existen excepciones a los grandes barcos que presten servicios públicos o de ayuda humanitaria o que se vean obligados a fondear o atracar en puertos catalanes fruto de situaciones de fuerza mayor o peligro. El anteproyecto también ofrecerá rebajas por conexiones a la red eléctrica portuaria ya los barcos que alimenten todos los servicios con electricidad suministrada por batería interna, así como reducciones a empresas que operen líneas de interés público entre Cataluña y Baleares.