¿Qué le ocurre a KTM?
Analizamos las causas y posibles soluciones de la grave situación de la marca austríaca de motocicletas, que actualmente hace frente a la peor crisis de su historia

KTM afronta las horas más graves desde su refundación en 1992. La histórica marca austríaca, que cuenta con varias filiales como Husqvarna, MV Augusta y GasGas, ha pasado en pocos años de ser considerada la primera empresa de motocicletas europea en volumen de producción a frotar la quiebra técnica debido a una deuda acumulada de más de 2.000 millones de euros que ha obligado a cerrar las instalaciones en su fábrica de Mattighofen —situada en la región de Alta Austria, no lejos de la frontera con Alemania—, despedir a unos 750 trabajadores y decretar una traumática suspensión de pagos.
Las causas deben buscarse en una deuda empresarial cada vez mayor y que se ha ido retroalimentando en los últimos años, hasta llegar a la situación de quiebra técnica actual. Stefan Pierer, director ejecutivo de KTM, apuntaba hace pocas semanas que "fabricar una motocicleta en Europa resulta un 30% más caro que en Asia", justificando así la decisión de deslocalizar una parte importante de la producción de motocicletas en India y China durante los últimos años y anunciando un "reajuste en torno a un 10% de la plantilla" para hacerla viable económicamente.
Pero el problema de fondo es la descompensación real entre la capacidad productiva de la empresa y la demanda real del mercado, que ha hecho que a lo largo del pasado año se haya acumulado un stock de más de 300.000 motocicletas fabricadas y no vendidas que lastran el futuro del grupo industrial. El cuello de botella comercial generado es tal que la dirección de la compañía ha apostado por cancelar la producción de nuevas motocicletas hasta finales de marzo, cuando volverá a evaluar la situación.
Pero poco serviría controlar la producción de nuevas motocicletas si el grupo KTM no consigue dar salida a las motocicletas ya fabricadas que aún no se han vendido. Así pues, la dirección del grupo KTM ya ha trasladado a concesionarios y vendedores la necesidad de reducir el stock almacenado de forma drástica con el lanzamiento de agresivas campañas comerciales y generosos descuentos con el objetivo de incrementar las ventas.
Asia, el desapego del futuro del grupo KTM
Durante las últimas semanas se han producido algunas conversaciones y aproximaciones para tratar una posible venta del grupo KTM a un gigante industrial asiático. Así pues, el gigante indio Bajaj, que fabrica más de 4 millones de motocicletas y ciclomotores anuales en la India, se postula como el principal candidato a comprar KTM y el resto de marcas subsidiarias (Husqvarna, GasGas y MV Augusta) y, de hecho, ya posee el 49,9% de las acciones. La vía india abriría una posible viabilidad al grupo KTM, pero también supondría una significativa deslocalización de los procesos productivos hacia sus fábricas indias.
La otra mesa de salvación de KTM podría ser otro gigante industrial asiático, en este caso la china CFMoto, que también colabora con KTM en la fabricación de motocicletas en China y que podría estar dispuesta a presentar una oferta de compra y un plan de viabilidad superior a los de Bajaj. Habrá que ver cómo se acaba solucionando el gran bache de KTM, si bien en estos momentos todas las soluciones y opciones de continuidad parecen pasar por Asia.