Mayte Corbinos: "Soy mucho de dejarme llevar, también en los negocios"

Formación

“Nací en Barcelona en una familia muy trabajadora, mi madre era pescadera y mi padre encargado de obras. Fui la primera de la familia en ir a la universidad y estudié administración y dirección de empresas en la Universidad Autónoma de Barcelona entre los años 1992 y 1996. Me había planteado estudiar medicina, pero desde pequeña había tenido ese interés por el mundo de la empresa y terminé escogiendo ADE. En paralelo, siempre me había gustado mucho el mundo internacional y la idea de marcharme fuera, y con 12 años me fui a Irlanda y después estudié idiomas, también. En 2005 estudié un MBA en la Thunderbird School of Global Management, que se encuentra en Arizona, porque quería tener una experiencia internacional. Posteriormente me he centrado en estudiar temas de nutrición para conocer bien el sector y también algunas formaciones en economía circular y marketing digital a la hora de emprender”.

Vida personal

“Cuando me encontraron con el virus de Epstein-Barr pensaba que no era verdad porque yo me encontraba bien de salud. Entonces, hablando con médicos, descubrimos que no había notado los síntomas gracias al agua de mar que hacía años tomaba por mi cuenta. Por eso decidí crear una marca que fabricara todos los suplementos que debía tomarme cada mañana”.

“Vivir en tantos países y desarrollarme tanto personal como profesionalmente en el extranjero ha sido una experiencia interesante. Al final te encuentras sola en muchas situaciones, como cuando fui madre en Estados Unidos, donde sólo tenía a mi marido, y eso te ayuda a conocerte a ti misma y hacerte valer en situaciones difíciles. Conciliar en este contexto es muy difícil, pero debes crearte una red de apoyo por tu cuenta”.

Vida profesional

“Al salir de la carrera entré a trabajar en el departamento de logística de HP en Sant Cugat. Más tarde, en 1998, pasé al equipo de marketing de la compañía a nivel internacional y en 2000 me fui a vivir a Alemania para seguir trabajando en HP. Pero en 2006 entré a trabajar en Nike en Estados Unidos, gestionando la marca para el mercado latinoamericano. En 2009, cuando estaba viviendo en Portland, creé una marca para fabricar sangría allí y ganamos el Annual Angel Oregon Investor Conference, fue toda una experiencia. En 2015 me fui a vivir a Dubai, donde ejercí de diseñadora de interiores hasta 2018. Entonces volví a vivir a Barcelona y me descubrieron que tenía el virus de Epstein-Barr. Gracias a esto me interesé por temas nutricionales y cofundé Blue Ocean Nutrition, donde creamos suplementos nutricionales basados ​​en agua de mar. En 2021 recibí el premio Dona TIC, también estoy vinculada al grupo de mujeres inversoras WeRockCapital y he hecho de mentora de empresas emergentes para Acción”.

Lecciones de vida

“Si algo es difícil, a veces es porque no debe ser. Soy mucho de dejarme llevar, también con los negocios, y si forma parte de tu misión de vida, funcionará. En cambio, si intentas forzar una idea y no eres coherente con lo que dices o lo que haces, no llegarás a ninguna parte”.

“Después de pasar por grandes empresas, ahora con mi propio negocio intento tener muy presente lo que aprendí: los valores de la compañía y su misión son esenciales, tanto en sus procesos diarios como en la estrategia empresarial . A veces las empresas emergentes carecen de esta base sólida y se desvían de sus principales objetivos, pierden el foco”.