La Plataforma Antitaurina del País Valenciano pide que se sancione "con dureza" el enganche de un menor

ValenciaEl atropello de un adolescente de quince años durante un acto de toros en la calle en el municipio valenciano de Vilamarxant, en la comarca de Camp de Túria, ha iniciado un debate sobre la participación de los menores en los eventos taurinos. La Plataforma Antitaurina ha expresado "su más absoluto rechazo" y pide al Ayuntamiento de la localidad que se supriman las actividades "basadas en el uso, la violencia y la humillación de los animales".

Este incidente no es un caso aislado: durante las festividades en las poblaciones de Simat de la Valldigna, en la comarca de la Safor, y Meliana, en l'Horta, tuvieron lugar dos accidentes en condiciones similares. La plataforma señala que la participación de menores "es más a menudo de lo que parece" y que pone en peligro su integridad física.

Diego Nevado, portavoz de la Plataforma Antitaurina del País Valenciano, ha manifestado su indignación por la presencia de menores en los festejos taurinos: "El comité de derechos del niño de la ONU lleva desde 2018 alertando de la necesidad de apartar a las personas menores de edad de la violenta tauromaquia", replica.

De momento, el joven de Vilamarxant se encuentra ingresado en el Hospital La Fe de Valencia, con pronóstico reservado. La Generalitat iniciará una investigación respecto a su participación, prohibida según el reglamento.

Protección al menor

Ahora la asociación pide el cumplimiento del artículo 70 de la ley de protección del menor de la Generalitat Valenciana, que advierte que los menores de edad no podrán participar ni asistir a "competiciones deportivas o espectáculos cuyo reglamento contemple la producción de daños físicos o psíquicos sobre personas o animales".

La reivindicación por el cumplimiento de la ley pretende evitar casos como el del joven de Alfafar, en l'Horta. El caso no recibió ninguna consecuencia legal y provocó manifestaciones en la localidad para pedir el fin de los eventos taurinos.

Por este motivo, el colectivo animalista demanda la abolición de cualquier práctica taurina, tanto los bueyes callejeros como los embolados, e insta a los ayuntamientos y administraciones competentes a poner fin a la tauromaquia en el País Valenciano.