El precio de la carga, más económico que la gasolina
El coste varía en función del tipo de punto de recarga
BarcelonaCargar un coche eléctrico no es ninguna odisea y ya se pueden hacer trayectos largos gracias a la red de puntos de recarga repartidos por todo el territorio catalán. Sí que es cierto que la red de puntos de recarga todavía no es lo suficientemente grande para alcanzar todos los vehículos que hay en el Principat si de la noche a la mañana pasaran a ser todos eléctricos, y también es cierto que usar puntos de recarga rápidos puede acabar repercutiendo en el coste de desplazamiento de manera significativa.
La manera más económica de cargar un coche eléctrico es hacerlo en casa y aprovechando las horas valle de la tarifa eléctrica (de 0 a 8 horas los días laborables y las 24 horas durante el fin de semana), cuando el precio de la energía se sitúa alrededor de los 0,15 euros por kWh, lo que nos permitiría hacer unos 100 kilómetros de recorrido por unos 2,90 euros. En cambio, si se carga el coche en las horas más caras del día, y en función de la compañía suministradora, el precio kWh se eleva hasta los 0,26 euros sin impuestos, lo que haría que, una vez sumado el IVA, cargar unos 20 kWh o el equivalente a unos 100 kilómetros supusiera un desembolso de 6 o 7 euros. Ahora bien, no todo el mundo dispone de un garaje o un aparcamiento privado donde poder instalar un punto de recarga, y esto obliga a tener que usar la red pública.
A grandes rasgos, podemos considerar que hay dos tipos de puntos o estaciones en función de la velocidad de carga. Los modos lentos, de tipo 2 (enchufe tipo schuko y potencia de hasta 3,7 kW) o de tipo 3 (que permite cargas de hasta 7,4 kW) son los más recomendados por los fabricantes, puesto que aseguran la duración de la vida útil de las baterías de litio y son los más seguros.
Pero en un viaje o desplazamiento con cierta prisa para cargar las baterías, se tendría que usar un punto de recarga rápida con enchufes de tipo CCS y potencias de entre 43 kW y 50 kW, a menudo situadas en grandes estaciones llamadas electrolineras y a unos precios por kWh sensiblemente por encima de la media doméstica. En función de la capacidad de carga del coche, se puede cargar un 80% de las baterías en solo media hora.
Para acabar, todavía hay en Catalunya un total de ocho puntos de carga todavía más potentes, llamados ultrarrápidos o superchargers, situados en espacios estratégicos de las carreteras y autopistas principales y donde se pueden encontrar cargadores de 80 kW (o incluso 120 kW), si bien son más caros. Se tendrían que usar solo de manera esporádica y no son compatibles con todos los coches eléctricos del mercado.
¿Dónde tengo que cargar?
La mayoría de coches eléctricos nuevos ya disponen de navegadores con información en streaming de las ubicaciones de los puntos de recarga, y es fácil encontrar varias aplicaciones o páginas web como la de Electromaps donde se pueden encontrar todos los puntos de recarga del Estado y otros países europeos, reservar un enchufe a una hora determinada, y gestionar el pago de manera telemática.
