Sánchez reclama a la Europol desvincular independentismo de terrorismo
Envía una aclaración sobre el informe de Situación y Tendencias del Terrorismo de la Unión Europea de 2023
Barcelona"No se puede negociar con quien, en la directiva en la que se fijan los objetivos de inteligencia para los cuerpos policiales, nos considera la segunda mayor amenaza tras el terrorismo yihadista y que pide a la Europol que nos trate de terroristas", advertía el ex president Carles Puigdemont durante la conferencia que celebró en Bruselas para fijar las condiciones para apoyar la investidura de Pedro Sánchez. El eurodiputado de Junts reclamaba, de este modo, reconocimiento y respeto a la legitimidad democrática del independentismo.
Solo veinte días después, el gobierno español ha pedido a la Europol "clarificar la naturaleza de los extremismos violentos" con el objetivo de desvincular el independentismo del terrorismo, tal y como quedó recogido en el informe anual de la agencia policial sobre la situación del terrorismo en la UE. Según ha avanzado El Mundo, el ejecutivo español ha enviado a la Europol una carta en la que traslada "todas las circunstancias para clarificar la naturaleza de los extremismos violentos referenciados y su clasificación como tales según los estándares internacionales en la materia".
El informe que vinculaba el independentismo al terrorismo era el de la Situación y Tendencias del Terrorismo en la UE, publicado en junio, y apuntaba al independentismo catalán y el vasco como "los más activos y violentos" del Estado. La carta, que firma el director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), Manuel Navarrete, y va dirigida a la directora ejecutiva de Europol, Catherine De Bolle, remarca que "en la actualidad las únicas organizaciones declaradas terroristas por los tribunales españoles son ETA y Resistência Galega" y que por eso aparecen en el epígrafe número 3. El número 4, argumenta, habla de "extremismos violentos", y es ahí donde, explica, trasladaron a la Europol "dinámicas que llevan a cabo determinados colectivos, entre los que se cita a los independentistas, relativas a la realización de escarnios y quema de banderas españolas". Sin embargo, aclara que en "ningún caso" estas actividades pueden tener relación con el terrorismo". En este sentido, fuentes del gobierno español han asegurado que nunca se ha calificado "ningún movimiento independentista de grupo terrorista".
La Europol culpó al Estado
Durante la presentación del informe, el director de la Europol, Jean-Philippe Lecouffe, en respuesta a la eurodiputada de Izquierda Diana Riba, esquivó la polémica y recordó que el informe recogía la información que transfieren los estados miembros. "La Europol después comprueba que los datos sean fehacientes, pero no es la Europol quien los define. [...] El marco normativo de cada estado miembro es diferente, y por eso les toca a los estados miembros definir los hechos que nos comunican", justificó Lecouffe.
Riba criticó que desde el 2017 hasta ahora ninguno de los informes anuales de la Europol había "cometido una difamación de este estilo" y acusó al gobierno español, liderado por Pedro Sánchez, de estar "creando un marco para justificar frente a la Unión Europea una intensificación de la represión contra el independentismo".
