Vilanova y la Geltrú, el primer 'punto de esperanza' de ballenas de la Península
Investigadores de la UPC dibujarán un mapa de unas 15 millas de ancho para realizar un seguimiento y estudio de rorcuales
BarcelonaEl primero punto de esperanza marina (hope spot, en inglés) de la Península estará en las aguas de la costa de Vilanova y la Geltrú. La fundación Mission Blue, una organización sin ánimo de lucro centrada en la conservación marina internacional, ha elegido la capital del Garraf para instalar un espacio de seguimiento y estudio de la conservación de ballenas y la biodiversidad. Se trata de un proyecto impulsado por los investigadores del Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas (LAB) de la UPC, que realizarán el seguimiento de rorcuales comunes, es decir, de ballenas. A partir de la observación, se pretende dibujar un mapa de unas 15 millas de ancho, unos 1.944 km².
Aunque suene imposible, algunos puntos de la costa catalana se consideran foco de alimentación para el rorcual común, la única especie que habita en el mar Mediterráneo y que puede tener 24 metros de largo. En este caso, la ONG Edmaktub –que estudian los cetáceos– indica que la zona de Vilanova y la Geltrú es crucial y hasta ahora ha sido poco estudiada.
El proyecto contribuirá a armonizar las estrategias de gestión de la Unión Europa para mejorar la gobernanza de la biodiversidad. Se realizará a partir de indicadores valiosos alineados con la Directiva Marco sobre la Estrategia Marina de la UE (Marine Strategy Framework Directive, en inglés).
El hábitat de los rorcuales, en peligro
La presencia de rorcuales en los últimos años en Cataluña ha sido escasa. De hecho, la asociación Edmaktub tuvo que detener su estudio de ballenas del 2023 a mitad de la temporada después de un mes sin vislumbrar ninguna. Por ello, el estudio pondrá el foco en siete especies que se ven afectadas por el alto tráfico marítimo y la contaminación acústica marina. El reto de este punto de esperanza marina, por tanto, es encontrar la forma que permita la covivienda de actividad humana y del medio natural.
Ahora bien, el punto débil de esta ubicación es la proximidad con las aguas de la costa de Barcelona. Las ballenas se alimentan a menudo de las zonas cercanas a la superficie, lo que aumenta el riesgo de colisiones con barcos y que amenaza directamente la vida de los cetáceos en un punto esencial de su alimentación. En este sentido, se busca apelar a la participación ciudadana y la sensibilización.
El director del LAB de la UPC, Michel André, ha explicado que "hay una necesidad urgente de desarrollar formas de convivir de los seres humanos con la naturaleza y de adaptar nuestras actividades para respetar la vida marina". "Formar parte de la red Mission Blue nos ayuda a entender los retos a los que se enfrentan el rorcual común y otras especies marinas en un mundo cambiante", valoró.
El sonido, el sentido que comparten el mar y los humanos
El sentido del oído es compartido por todas las especies marinas y humanos. Por ello, el estudio destaca el uso del sonido como una herramienta de investigación no invasiva que ayuda a conocer y entender mejor el entorno marino. El sol se considera primordial para conectar ecosistemas y reforzar la conservación marina. De hecho, los sonidos submarinos pueden servir para unir puntos de esperanza marina de todo el planeta.
Con el reconocimiento de este punto de Vilanova y la Geltrú se da el pistoletazo de salida oficial de la campaña Sounds of Hope, la cual pretende concienciar y fomentar la colaboración entre los 165 hope spots existentes. Así, los sonidos crearán una red acústica que resonará por todos los rincones del mundo y harán posible la protección de los ecosistemas marinos.