Seguridad vial

Tres trucos para enfriar rápidamente el coche durante los días de mayor calor

Las altas temperaturas son un factor de riesgo muy relevante a la hora de conducir

Para ser efectivo, es necesario accionar el aire acondicionado al máximo
28/06/2025
2 min

Llega el verano y, con él, los meses de mayor calor del año. Coger el coche después de haberlo estacionado en un lugar expuesto a la luz solar puede ser un auténtico infierno para los ocupantes, y con poner en marcha el sistema de refrigeración a máxima potencia no es suficiente para aclimatar el habitáculo con cierta rapidez.

Según la DGT, la temperatura óptima para conducir un vehículo es entre los 22 y los 24 grados como máximo, y circular a una temperatura superior a los 35 grados tiene un efecto similar al de conducir con una tasa de alcoholemia en la sangre de 0,5 g/l. Esto significa que el calor puede incidir de forma directa en la seguridad vial y en la probabilidad de sufrir accidentes de tráfico.

Tres trucos para enfriar rápidamente el coche

Existen algunos métodos para intentar que el aire caliente circule y salga del habitáculo del coche de forma rápida y efectiva, como lo que se conoce como método japonés, una técnica sencilla y efectiva. Basta con bajar la ventana de la puerta del acompañante y abrir y cerrar la puerta del conductor repetidas veces, en un efecto de abanico que permite expulsar el exceso de aire caliente del habitáculo.

Un segundo método, menos efectivo que el primero, consiste en abrir y cerrar la ventana del conductor unas diez veces para obtener el mismo efecto de expulsión del aire caliente de dentro del habitáculo y refrigerar su interior.

Un tercer método que permitirá refrigerar el vehículo una vez en marcha es poner en marcha el aire acondicionado a poca intensidad en los primeros metros y circular con todas las ventanas bajadas. Una vez ganamos velocidad y potencia podremos subir las ventanas y programar más potencia en el aparato de climatización. Por último, es recomendable apuntar o dirigir las salidas del aire acondicionado hacia el techo del coche, ya que el aire caliente pesa menos que el frío y de esta forma podrá refrigerar el coche de forma más efectiva. Cuando el vehículo esté ya frío podremos activar el sistema de recirculación del aire acondicionado y minimizar el esfuerzo de refrigerar el aire procedente del exterior incidiendo en el ahorro de carburante.

Más allá de estos tres métodos, hay que recordar que es del todo conveniente remojar la carrocería del vehículo con agua fresca antes de cogerlo, intentar aparcar en la sombra el máximo de horas y hacer uso de fundas para el volante y para las sillitas infantiles y no olvidarse de colocar los parabrisas para colocar los parabrisas.

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